GABRIEL Y ELADAR EN LA ISLA DE LOS GRIFOS

DÍA 1
Gallahad  ha ido  a hablar con sus Espadas  y  le  han  ordenado que tiene  que  partir  cuanto  antes  para  matar  a  Gabriel,  nos  ha  hecho llamar pero yo estaba dirigiéndome a una reunión con mis sacerdotes y  no  he  podido  asistir,  por  lo  que  me  ha  contado  después  solo  han acudido  Luthien  que  ha  podido  entrar  con  permiso  de los  Espadas  y Raphi.    Mientras  me  he  reunido  con  mis  Sacerdotes  para  hablar  de  lo  que está ocurriendo alrededor de la ciudad y les he expueto que se podría hacer  el  mito  que  encontré  en  las  antiguas  escrituras  de  Lankor  Mhy para poder encontrarla, ya que yo conocía quién era ella y que iba a ir  acompañado  de  el  gran  acólito  y  maestro  de  la  espada  y  de  la muerte   Gallahad,   de   la   bella,   escultural   y   no   me   menos   mortal Luthien,   del   mejor   bardo   de   la   ciudad   y   gran   acólito   de   Aldrya Harendul,   de   un   buen   chamán   tropical   de   Aldrya   Himaldaru, aunque  con  pájaros,  y  de  la  nueva  incorporación  la gran  sanadora  y protectora  de  los  heridos  Saphi.  Al  ver  de  lo  bien que  iba  a  ir acompañado   la   gran   parte   de   los   sacerdotes   se   accedieron   a   que hiciéramos el mito para encontrar la ubiccación exacta de Gabriel.
DÍA 2
Llevamos  toda  la  semana  repasando  el  mito  una y  otra  vez  para que  no  se  nos  pase  nada  por  alto,  y  podamos  acabar el  mito  lo  más fielmente posible. Mañana es el gran día, estoy nervioso y emocionado por rememorar este mito de Lankor Mhy. Cuando  entramos  en  el  mito  era  de  noche,  y  no  encontrábamos  en una   casa  de  madera  que   crujía   por   todas  partes,  estábamos   todos sentados  alredor  de  una  mesa  y  un  poco  aturdidos  y un  hombre encapuchado   diciéndonos   :   “así   que   teneis   que   hacerlo   ya”,   le pregunté  que  es  lo  que  teníamos  que  hacer  y  nos  contó     que  los bárbaros  se  internan  cada  vez  más  en  "nuestro"   territorio.  Tienen magia  chamánica  poderosa  (se  cuenta  que  despertaron  a  un  espíritu poderoso  que  se  comió  a  un  ejército  entero  vomitando  los  huesos,  que son  ahora  la  tribu  bárbara)  y  necesita  magia  más  poderosa  aún  que puede  ser  conseguida  con  un  alto  precio  gracias  a  las  sacerdotisas  del culto Las  Hermanas  de la Piedad. Si  no  conseguís  traer esa  magia con vosotros,  el  reino  de  Rashonara,  creo  que  es  una  diosa  solar  maligna, puede  caer,  que  estaban  a  10  días  de  camino  a  caballo,  nos  dió material,   dinero   y   un   mapa   de   la   región   para   poder llegar   con facilidad.  El  nombre  me  sonaba  mucho Kazkurtum,  hasta  que  me acordé que era  el Dios de Nada, el Emperador Vacío.
DÍA 3
en el mito Llevamos  3  días  a  caballo  yendo  hacía  el  bosque,  y me  da  la impresión que  aquel  tipo  era  Eurmal  en el  mito,  ya que  nos  dijo  que no entenderíamos el porqué de la guerra con los bárbaros, y me da que era  cuando  Lankor  Mhy  se  ofendió  porque  no  había  cosa  que  él  no supiese, bueno ya es tarde para arreglarlo, pero que rabia que me da.    Hemos decidido rodear el bosque para evitar problemas.    A  mitad  mañana  nos  han  em  boscado  un  grupo  de  hombres  mono que se ivan deslizando por las copas de los árboles y nos atacaban con
hondas, hasta  que Hârendül le ha  dicho a su  silfo  que entrara en él, y se ha convertido en un silfo que los ha ahuyentado.     Por   la   tarde   hemos   alcanzado   unos   tótems   enormes   con   forma humana,  Himladaru  a  conectado  con  ellos  y  le  han  dicho  que  se alimentaban  de  carne,  por  lo  que  debe  ser  Borgorgor,  además  els  ha dicho  que  las  hermanas  van  al  pueblo  a  por  gente  o algo  así,  y  que ellas  fueron  las  que  los  dejaron  así,  por  lo  que  tendremos  que  ir  con mucho ciudado con ellas cuando nos encontremos con ellas.     A última hora del día Gallahad a encontrado un sendero hacia el interior del bosque, vamos a ver que nos encontramos, pero esta noche descansaremos fuera de él, por si nos quieren atacar.
DÍA 4
Nos hemos levantado y nos hemos dirigido por el sendero hacía la aldea  de  Lho para ver  si  nos encontramos  civilización  que  nos pueda hablar  de  las  Hermanas  de  la  Piedad.  Hemos  llegado a  primera  hora de  la  tarde,  y estaban  todos  los  aldeanos  escondidos  en  las  cabañas, a primera vista parecía un poblado primitivo, por precaución les hemos hablado   primero   en   Himrralés,   pero   no   nos   han   contestado,   acto seguido les he hablado en Comercial a ver si había suerte, y sí que la ha  habido,  bueno  más  o  menos,  de  cada  diez  palabras  que  decían  se les  entendían  tres,  pero ahí me  he puesto  a  hablar con ellos,  al  final he conseguido acercarme sin ain armas para que vieran que no quería hacer daño, mi asonbro ha sido enorme cuando ha salido el jefe de la tribu,  ya  que  ha  salido  con  un  colgante  que me  ha  hecho  estremecer, estaba de hecho de dedos y ojos humanos.     He  conseguido  algo  de  comida  a  cambio  de  una  espada  bastarda, que había comprado en Aguas profundas con una belleza exquisita, y me  han  empezado  a  pedir  más  “brillante”  que  decían ellos.  Después de “hablar” un poco con ellos, les he hecho un gesto al resto para que se  acercase,  ellos  querían  más  “brillante”,  así  que  les  he  ofrecido  la coraza  falsa  de  Gallahad  a  cambio  de  5  mujeres  de  la  tribu,  iba  a tener un harén hasta que Gallahad a dibujado los tótems en el suelo y se  ha  torcido  la  negociación  en  ese  momento  se  han cerrado  a  toda trasacción con nosotros, me ha dolido en el alma, no solo por el harén sino  porque era  la  forma  ideal  de  investigar a  una cultura  primitiva en su ambiente natural, y poder ver sus costumbres.
  Cuando  intentábamos  salir  del  bosque  nos  han  vuelto  a  atacar  los primitivos   con   hondas,   y   nos   han   dejado   mal   heridos   y   hemos escapado por los pelos, hemos estado huyendo toda la noche.
DÍA 5
Ha sido un día de perros, para empezar hemos estado toda la noche huyendo   de   los   primitivos   y   cuando   estabamos   descansando,   que Ludien  ya  estaba  en  trance  nos  han  atacado  otra  vez,  Gallahad  que tenía   roto   el   brazo   derecho   ha   sacado   la   espada   con   su   mano izquierda  y  ha  gritado:  “por  Humakt!!!”  y  ha  cargado  contra  ellos como  un  loco,  yo  he  tenido  que  dar  una  patada  a  Luthien  para  que saliera del trance y ayudara a Gallahad, por suerte lo he conseguido a la  primera,  y  sin  hacerle  daño,  cuando  la  pobre  se ha  levantado  y hemos salido los dos hacia allí corriendo para ayudar a Gallahad, el humaktita  ya  había  matado  a  uno  de  esos  primitivos e  iba  a  por  el segundo,  cuando  nos  estábamos  acercando  Ludien  y  yo  salieron  otros tres  primitivos,  y  nos  dispararon  con  hondas,  amí  me  alcanzaron  en la pierna y perdí el equilibrio, Ludien apenas la rozaron y consiguió llegar a ayudar enseguida a Gallahad se colocó a distancia de combate de  los  tres  primitivos  que  nos  habían  tirado  las  piedras,  ellos  ya tenían  en  las  manos  lanzas  y  escudos,  mientras  me  levanté  y  seguí corriendo   hacia   Gallahad   que   seguía   pegándose   con   el   primitivo, decidí  cargarle  gritando  para  llamar  su  atención  sobre  mí(aunque tenía los dos brazos rotos e iba cojo de una pierna) y así que Gallahad le  clavara  la  espada  a  placer,  por  suerte  no  me  dió  con  su  lanza  y Gallahad  si  que  consiguió  darle  un  espadazo  en  la  cabeza,  entonces levanté   la   cabeza   y   ví   que   Ludien   estaba   rodeada   por   los   tres primitivos,  así  que  seguí  mi  carrera  hacia  ella  para  ayudarlas,  pero en ese instante vi que la empezaron a atacar, y ella con una velocidad sobre  humana  cegó a  uno  de  ellos  con  tierra  y  les  quitó  de  las  manos las  lanzas  a  los  otros  dos  mientras  detenía  con  sus  garras  a  aquellos hombres, cuando llegué golpeé con la cabeza a uno de ellos, para que ella puediera deshacerse  de ellos con  más  facilidad, pero el primitivo se revolvió y me mordió la oreja y se quedó en su boca parte ella, y se cayó  encima  mío  por  un  asombroso  garrazo  de  Ludien,  en  el  fondo Gallahad    ya    estaba    rematando    los    cadáveres    de    los    primitivos mutilados. Cuando  volví  a  girarme  hacia  Ludien  para  agradecérselo  ella  se cayó  al suelo a causa de la fatiga que llevabámos, Gallahad se acercó para  llevarla  a  la  carreta  mientras  yo  golpeaba  con  el  pie  la  cabeza del  primitivo  que  me  había  arrancado  la  mitad  de  la  oreja,  cuando me dirigía hacia la carreta Gallahad estaba dejando a Ludien encima de  la  carreta,  y  fue  dejarla  y  también  caer  al  suelo  por  el  cansancio, así  que  sin  brazos  no  podía  subirlos  y  taparlos  con  los  sacos,  intenté hacer guardia hasta que se despertaran, pero el cansancio me pudo, y también caí en un sueño profundo.
DÍA 6
Día 6 del mito (Creo)
Hemos despertado después del día de “ayer” porque no ssé cuanto hemos dormido, me he despertado el primero, al principio tenía miedo por si nos habían capturado los primitivos pero cuando he comprobado que no era así he respirado profundamente.Mientras se despertaba el resto he estado pensado que puede que estos dos ataques de los primitivos sean una especie de castigo por fallar dos de las estaciones del mito, la de Eurmal, por no darnos cuenta, y la de
Issaries por no llegar a comerciar, no se ya veremos... Poco más tarde se han despertado el resto, me ha dado de desayunar Gallahad, ya que tenía los dos brazos rotos, mientras Ludien preparaba sus hechizos con unos bailes bastantes distraidos para mí. Cuando estuvimos bien comidos y descansados hemos salido hacia el río, extrañamente no hemos visto no el puente ni el ferry, y además parecía o que el bosque se había movido o bien los tótems. Al final nos
hemos decidido a ir con el río a nuestra izquierda, de manera que si no encontrábamos el meandro volveríamos por nuestros pasos, al poco de andar hemos visto una zona de fácil acceso al río para dar de beber a los caballos que estaban agotados, cuando nos hemos acercados hemos visto algo en el agua, cuando lo hemos visto claridad Gallahad,
Himladaru, Hârendül y yo nos hemos quedado helados cuando hemos visto que era la mismísima Gabriel, y entonces ha desaparecido bajo el agua otra vez Saphy y Luthien nos han preguntado queu quien era y Gallahad les ha contestado, mientras yo pensaba como era posible que estuviera por aquí, de forma que la única solución era que estuviera
haciendo el mito para quitarse el rasgo caótico. Mientras les dábamos de beber a los caballos, yo me fijaba en la
corriente tan fuerte que había, y Gallahad se ha dado cuenta que de repente habían vuelto a aparecer tanto el ferry como el puente, cuando los caballos se recompusieron con el agua nos dirigimos al ferryAllí nos apareció una mujer oronda con unos pechos descomunales al igual que su pelo, a cambio de diez monedas de plata nos llevaba a todos al otro lado del río, así que primero pasaron Himaldaru, Hârendul, Saphy y Ludien con el carro y después iríamos Gallahad y yo con los caballos restantes, ellos consiguieron pasar muy bien, el problema vino cuando tuvimos que pasar Gallahad y yo, a la
mujer le resbaló la pértiga que utilizaba para mover la barcaza y nos dijo que tirásemos las piedras al agua( las utilizaba para regular la barcaza), como yo no podía Gallahad con su mano izquierda cogió una y la lanzó, la sorpresa vino cuando se dió cuenta de que su mano se había pegado a él, y la mujer le pateó el culo y lo lanzó al río, y acto seguido vino con una piedra a por mí, me la lanzó y pude interponer un caballo entre los dos y el pobre caballo fué quien recibió un pedrazo impresionante, menos mal, corrió hacía intentando pegarme un puñetazo yo iba metiéndo entre los caballos
para evitar que me diera, pero al final me alcanzó y me golpeó la cabeza y caí inconsciente del golpe, lo único que recuerdo es despertarme no se cuanto tiempo después en la barca con la cabeza sangrando y bajando por el río sin poder utilizar la pértiga por tener los brazos rotos, así que decidí observar alrededor y empezé a hablar con Kark y me dijo que aquella mujer era caótica tuve una gran discusión con aquel espíritu dentro que estaba dentro de la rata, que
me decía que se había escondido cuando vió que era caótica en vez de decírmelo, ya le he dicho que para la próxima primero me diga que es caótica y que despuéss esconda. Ví que Himladaru corría por delante de la barca, y en ese
momento moví a los caballos hacía el lado opuesto en la barca para que esta se dirigiera hacía el lado de Himladaru. Cuando la barca llegó a un meandro Himaldaru y Ludien me lanzaron una cuerda entonces acerqué un caballo para que pusiera dentro del lazo de la cuerda la pata de forma que la fuerza del caballo nos acercara a la costa, pero cuando levanté la cabeza observé que Himladru se estaba cortando la cuerda que se había atado a la cintura, para no caer al
agua. Poco más tarde ví que habían unas piedras y que la velocidad que llevaba no era muy rápida así que jugué con el peso de los caballos moviéndolos de un sitio a otro de la barca para que nos acercara a la costa donde estaban Himladaru, Ludien y Saphy, por suerte lo conseguí me lanzaron otra cuerda y pude subir donde ellos y acto seguido le dige a Saphy que curara que no podía ir por ahí con los brazos rotos y cabeza medio abierta, así que como buena hermana xemelita me curó. Cuando creía que la cosas no podía ir a peor así fue vimos que se acercaba un hombre que por las vestimentas parecía del panteón de las tribus de las tormentas, nos acercamos cuando Kark nos dijo que
no era caótico, y nos dijo que iba buscando a una cazadora que le había quitado la presa, cuando le heché un vistazo más exhaustivo observé que su deidad era Odayla la diosa de los cazadores, mientras hablabámos con él aún un poco a distancia salió un hombre de entre los matorrales diciéndonos que o la bolsa o la vida en Comercial, yo les dije que no hacía falta que llegaramos a las manos, pero que no les íbamos a dar las ni las armas ni el dinero, nos lo volvió a decir y que si no nos tirábamos al suelo nos dispararían, todos se tiraron al suelo, yo harto de que nos tiraran piedras, nos atacaran seres caóticos, y que nadie quisiera dialogar sin querer matarnos me negué en rotundo, entonces me dispararon una ballesta a la que le habían lanzado el conjuro multimisil, el cual pude esquivar, en ese momento me enfadé aun más y les empezé a amenzar diciendo que Ludien les iba a matar, y que se iban a arrepentir, en ese momento salió Ludien como un tiro a por ellos, mientras los bandidos sacaban espadones para atacarnos en combate cuerpo a cuerpo, Saphy intentaba todod lo contrario con buenas palabras que nos dejaran en paz, y Himladaru
alcanzó desde el suelo a uno de ellos con su arco en el brazo, Ludien consiguió llegar hasta ellos con un virote clavado en el brazo, y al primero que pilló le atravesó la cabeza mientras le clavaban una espada en ese brazo, y para asombro de todos la espada no le hizo nada, el bandido se quedó blanco cuando lo vió, escuché un ruido por detrás y vi como al cazador le habían atravesado el pecho con una espada y Saphy empezó a curarlo a destancia, y el gigantón empezó a
venir hacia nosotros, yo seguía con mi arenga para desmoralizarlos, sobre todo después de de que Ludien atravesara a uno de ellos, el grandote que destrozó al cazador me amenazó de muerte y se fué y el de la espada de Ludien depuso las armas. El gigantón se marchó corriendo amenazandome de muerte mientras se iba, y al que depuso las armas le preguntamos un par de cosas y lo dejamos ir con la espada para que no le pasara en la cordillera de los broos. Mientras Saphy curó a forastero que se vino con nosotros para buscar a la cazadora. Empezamos a volver hacia el carro y pregunté por Gallahad, entonces me dijeros que no pudoeron hacer nada por él en ese momento me apené mucho durante todo el camino cuando llegamos hice un par de oraciones en su honor y nos fuimos. En el carro faltaba todo el equipo que nos habíamos dejado que en gran parte era la comida que nos habían dado. Continuamos en silencio hacía nuestro destino las Hermanas de la piedad, poco a poco el el camino se iba haciendo más escarpado y con
menos vegetación, cuando oscureció decidimos acampar en un lugar elevado por si empezaba a llover.
DÍA 7
Hoy según nos hemos levantado hemos visto a lo lejos el monasterio de las Hermanas de la piedad, hemos desayunado hemos partido hacia allí. Cuando nos acercábamos observamos que había muchísimas tumbas a ambos lados del camino, y de repente han aparecido un montón de espíritus que cada vez iba aumentando y aumentando, yo me he quedado templado del miedo al igual que el chamán, pero Luthien y nuestro nuevo compañero se han quedado paralizados, Saphy fué la única que apenas le afectó el ver tanto espíritu alrededor nuestro, los espíritus rondaban sobre todo alrededor de Ludien y de Saphy, al final llegamos al templo de las Hermanas de la Piedad que estaba al final de tan tétrico recorrido. Allí nos esperaba un necrófago mayordomo, que salió a nuestro encuentro, y nos indicó con la mano la entrada del templo, y entramos allí, el templo era circular e iba bajando en anillos cada vez más pequeños, hasta que tres anillos más abajo se encontraban cinco mujeres sentadas en unos tronos totalmente enmascaradas y con unas
túnicas alrededor cubriéndolas, en frente suyo había otro trono cara a ellas, pero este estaba vacío. A distancia se empezaron a dirigir mentalmente con nosotros, tenían personalidades muy distintas, una que era pervertida sexualmente, otra muy pasiva, otra desconfianda, y otra dominante, nos dijeron que bajaramos y así hicimos, empezaron a
preguntarnos que es lo que queríamos, yo contesté lo que nos dijo Kazkurtum lo de los bárbaros y entonces todas se levantaron nos señalaron con su mano derecha, y de repente todos las escuchamos a la vez en nuestra cabeza y en una fracción de segundo nos hicieron las siguientes preguntas:
- ¿ A que Dios rezas?
- ¿Quieres saber cuando vas a morir?

Por lo visto la única persona que respondió bien las preguntas fue Ludien, y le dijeron que Kazkurtum nos habí engañado que lo que quería era un objeto para poder hacer que Rashonara siguiera viviendo, ya que iba a morir, y entonces las damas le dijeron que si les traíamos unos maridos para que se casasen con ellas y traíamos a Rashonara para que las gobernara nos darían lo que habíamos ido a buscar, los maridos debían ser totalmente opuestos a las personalidades que tenían ellas.
Así que nos fuimos de allí y Ludien nos lo explicó todo lo que le habían dicho las Hermanas, así que descendimos por el tétrico camino rumbo otra vez hacia el río pensando como lo debíamos hacer para que fuera como el mito, ya que debíamos engañarlas para obtener lo que necesitamos, así que Ludien propuso ir a por los bandidos que nos
habían asaltado para que se casran con ellas, Himladaru propuso ir a por los espíritus y llevarles los espíritus, yo propuse coger gente de la tribu y hacer que tocaran los tótems y para que los espíritus los posean y convencerlos para que se hicieran pasar por las personalidades opuestas a las damas y después ejecutar su venganza, y también coger a
una mujer de la tribu para que se hiciera pasar por Rashonara, también se propuso que una sola persona se hiciera pasar por los maridos comportándose de forma distinta con cada una de ellas. Así que a mediodía llegamos otra vez al río, ya que no había ferry decidimos y por el puente, primero pasó Ludien, que consiguió pasar más de la mitad del mismo, hasta que se caló al agua, Saphy corrió a socorrerla, llegó enseguida hasta donde había caído Ludien, con tan
mala suerte que también se cayó, ya que los cartílagos del puente eran demasiado flexibles y el puente se movía en exceso con cada paso, con dos personas en el agua nuestro nuevo compañero intentó también cruzar el puente pero también se cayó ante la mirada de Himladaru y la mía, Himaladaru se fue a buscar otra forma de pasar, mientras que
Ludien y nuestro nuevo compañero salían a flote, a Saphy ya no la vimos salir del río, entonces decidí cruzar el puente con muchísima cautela, pero aun así dí un mal paso y caí al agua, casi me ahogo, pero pude agarrame a una piedra y coger aire. De repente me encontraba en la superficie agarrando la nada en la orilla del río de la que había intentado partir, miré alrededor y para mi asonbro ví un mostali de plata, que me había sacado del agua, me dijo que le ayudáramos a salir del plano heróico, pero de todas formas se mantendría a parte porque no se fiaba de los elfos que venían conmigo, al poco llegó Himaladaru que había ido a buscar un tocón de madera a un pinar cercano para poder sacarme del agua, le conté lo sucedido con el mostali, entonces sacó el arco y una flecha apuntando hacia la arboleda que le había dicho que se había el mostali, en ese momento le ví envuelto ene una esfera en la que no podí verle ni oirle, y creo que el tampoco podía ni verme ni oirme, al rato desapareció la esfera que le envolvía, y ya más tranquilo, le dije que fuera a buscar leña seca para hacer fuego, mientras me quité la ropa, y empecé a tratar de que los libros que llevaba se secaran, para ello cogí los intrumentos que tenía, para la botánica y fui separando hoja a hoja y con sumo cuidado para que no se estropearan más aun. Cuando llegó Himladaru hicimos fuego para que se secaran el equipo y poder cenar, al otro lado del río se podían divisar a Ludien y a nuestro nuevo compañero, que estaban a salvo.
DÍA 8
Por la mañana cuando despertamos estábamos en el otro lado del río junto a Ludien y nuestro nuevo compañero, así que recogimos todo el equipo, y marchamos hacia los tótems, a lo lejos observé que el mostali nos seguía a cierta distancia, cuando llegamos Himladaru se puso a hablar con los espíritus que allí habitaban, después estuvimos hablando de que en realidad la parte de Borgorgor no la habíamos hecho, ya que no habían intentado comerse mis conocimientos, así
que de paso intentabamos hacer lo de las Hermanas haremos también lo de Borgorgor, yo les dije que hasta que no encontraramos un espíritu amistoso para que me ayudara a enfrentarme a estos espíritus yo no tocaba ningún tótem, así que Himaladaru se puso a buscar espíritus por el bosque y vió una zona en la que los espíritus se concentraban, una pequeña charca, pero estaba muy lejos, Ludien se fue a cazar y trajo un conejo para la cena, o eso pensaba yo, tal cual llegó lo tiró contra el totem para ver que pasaba por si entraba en combate con el conejo, esta elfa que piensa que le vamos a llevar como
marido de las damas a un conejo o que, así que decidimos pasar la noche allí mismo, junto a los tótems.
DÍA 9
Nos levantamos y nos fuimos directos al sitio donde Himladaru, nos costó poco tiempo llegar por el bosque, una vez allí Himladaru se puso a buscar espíritus, encontró uno de un mono pero no consiguió convencerlo, para que nos ayudara, al final hablé con Himladaru y le convencí para que sus espíritus e ayudaran a enfrentarme contra el espíritu, así que volvimos otra vez a los totems, de camino nos encontramos un hombre que nos traía un mensaje de Kazkurtum, que fueramos al día siguiente a darle lo acordado, de forma que cuando Himaladaru dispuso de todos los espíritus me dispuse a tocar el totem,
en el momento que lo toqué sentí como un golpe en la cabeza, y de repente ví enfrente mío un ser al que no puedo describir, intentaba comerme, según me reponía observé con otro ser atacaba al que me estaba atacando, así que al ver que el espíritu de Himladaru me ayudaba decidí atacar yo también como pude, conseguimos debilitarlo mucho y al final conseguimos derrotarlo. Después de disipar al espíritu no sabía que pasaba y no volvía a mi ser, hasta que escuché la voz de Himaldaru guiándome hasta mi cuerpo, y conseguí despertar.
Cuando desperté me contaron que había aparecido un hombre que les contestó a la pregunta de donde estaban las hermanas de la piedad, que es lo que correspondía a la parte del mito. Acto seguido nos pusimos a discutir de que debíamos hacer: si coger a gente del poblado de Lho, si ir a por los bandidos y convencerles o si volver a hablar con Kazkurtum, para ver que pasaba, así que al final decidimos ir a los bandidos, así que nos hacercamos al puente de hueso y busqué la vasija que encontré en el otro lado, puse dinero dentro por si el puente se hacía más fiable, pero no, le pusimos sangre, agua comida, Shak, el semielfo bárbaro de Odayla, lrezó para que se acercaran unos conejitos, los mató y pusimos sus huesos y tampoco pasó nada, así que no nos queríamos arriesgar a cruzar ese maldito puente otra vez, de forma que fuimos otra vez al ferry a ver que encontrábamos en la caseta de aquella criatura caótica, cuando llegamos la puerta no tenía pomo y estaba cerrada desde dentro, le dije a Kark que vigilara por si veía una criatura caótica, así que como nadie sabía como abrir la puerta cogí un martillo que llevaba Himladaru en la espalda y empecé a golpear la puerta hasta que hice un agujero y pudieron quitar el tablón que bloqueaba la puerta. Ludien y yo nos dispusimos a entrar con una antorcha para poder ver mejor dentro, ya que no habían ventanas en la casa, cuando entramos habían muchos cadáveres en descomposición entre ellos el de Gallahad, todos ellos sin ningun hueso, de repente me dí cuenta que al entrar con la antorcha y con los cadáveres, podrían haber gases y
explotar toda la casa cogí la antorcha y enseguida la apagué, antes de que pasara nada, intenté buscar cosas por dentro pero no pude aguantar la peste que ahí dentro había y me tuve que salir, Himladaru y Shak estaban fuera apuntando no se donde, por si pasaba algo, de repente Shak se empieza amover enciende una antorcha y prende la casa que poco después explota a causa de los gases acumulados. Una vez quemada y explotada la casa nos dispusimos a comer los conejos matados por Shak, estaban horriblemente mal cocinados, mientras comíamos volvimos a hablar de qué hacíamos ya que no podíamos cruzar el puente así que decidimos ir andando hasta donde estava Kazkurtum. Al terminar de comer salimos
DÍA 10
Llevamos un día andando camino a la mansión de donde salimos a ver que podemos hacer y si nos pueden proveer de los hombres que necesitamos.
DÍA 11-18
A lo lejos ya veo las colinas que estaban cerca de la mansión creo que como mucho nos quedan un par de días.
DÍA 19
¡Por fín ¡ hemos llegado a la mansión, cuando hemos entrado sentado en la mesa donde empezamos estaba sentado Kazkurtum, nos sentamos y nos pidió explicaciones, de porque habíamos tardado tanto y porqué no le traíamos lo que nos había pedido, así que le dije la verdad que nos faltaban ocho hombres y una mujer para poder conseguir la magia que nos pedía, además de que no podíamos cruzar el río, se enojó muchísimo llegando a asacar la espada, que tenía una
tez morada, al ver eso me levanté y les dije a mis compañeros en Himrrales: ¡que nos ataca! De forma que Ludien intentó hacer una magia que no le salió y Kazkurtum le dijo que no hiciera más magias en esa sala o nos arrepentiríamos de hacerlo.
Se ve que se tranquilizó y nos ofreció agua, comida y mujeres para esa noche, que se iba a hablar con su jefe para ver que hacían. Y así fue nos mandó comida y mujeres para pasar la noche.
Día 20
Hemos caminado un par de días hasta llegar a la ciudad para conseguir los novios para las hermanas de la piedad, escogeremos a unos nobles que van a engañar diciendo que es para una misión diplomática para la reina. Nos han dicho que tardarán un par de semanas  para la fiesta en la que reunirán a todos los nobles, así que vamos a estar en una posada y aprovecharé para ver la ciudad, que parece preciosa.
DÍA 35:
Ya han pasado 15 días y hemos tenido la reunión con los nobles ha sido muy complicado para seleccionarlos, ya que algunos han sospechado y se han ido, creo que shack ha dicho algo indebido y han sospechado que era una encerrona y se ha ido pero nos hemos quedado con unos que creeemos que pueden servir, mañana saldremso de vuelta con las hermanas de la piedad.
DÍA 36:
Llevamos unos días de viaje y vamos en carros, la reina supuestamente va en el carro blndado al cual no se puede acceder, de momento todo transcurre como imaginábamos.
DÍA 37:
Esta noche hemos tenido un incidente ha muerto un guarda de los que venían con nosotros y nadie ha visto su asesino, es extraño porque son enormes y estaba descuartizado, y nos han parado para revisar las armas que llevábamos, y no ha habido problema.
DíA 38:
Esta noche hemos hecho nosotros la guardia con los guardias por seguridad, y ha sido una pesadilla, se me ha presenciado un espíritu (otra vez) y me ha atacado(otra vez) y me ha enviado al plano espiritual para luchar conmiga, gracias a Lankor Mhy ha llegado ha aparecido Himladaru y ha luchado con él y lo ha mandado al plano espiritual y me ha guiado hasta mi cuerpo, menos mal, le debo la vida.
Día 39:
Hemos llegado al punto conflictivo el “ río de la muerte” hemos optado por bajar hasta donde estaba la balsa y remorcarla hasta donde estaba el vado y cruzar por ahí, Luthien ha sido la que guiaba la balsa y ha pasado todos los carros menos mal que no hemos tenido incidentes.
Día 40:
Por fín estamos en casa, el final del mito por lo visto no ha salido bien solo teníamos una palabra en la cabeza -ZAR-, y no sabemos por qué ha salido tan mal, al final llegamos al templo los nobles estaban enfadados con nosotros con el engaño, y por la cantidad de fantasmas que había, cuando les hemos entregado han prometido vengarse.
Aunque el mito lo hubiéramos hecho mal, que puede ser, el mundo como lo conocimos ha cambiado totalmente, nos hemos encontraado con un nuestra ciudad irreconocible, cuando llegamos del mito, no había nadie, más que un iniciado inconsciente al lado nuestro, hemos investigado la sala y hemos encontrado unos seguidores de Gark amenazando a un sacerdote para saber si hemos vuelto. Afortunadamente se han marchado sin incidentes, y no nos han visto. Le he preguntado al sacerdote y me ha dicho que llevamos 3 meses fuera y que no nos pueden curar que está prohibido, cosa que me extrañó, que desde hacía mucho tiempo que ya no habían templos de curación en la ciudad y que el templo mayoritario era Gark de forma que toda persona que moría después servía a la ciudad, cosa que me perturbó  mucho.
Así que por precaución hemos decidido quedarnos en el templo para poder investigar la palabra que tenemos en nuestra mente. ZAR
DÍA 41
Al mostali le ha venido una idea, y viene de que la palabra se parece mucho a un juego de azar, ya han decidido unos pocos salir por la noche e ir a las zonas menos recomendables para ver que consiguen averiguar sobre el juego, mientras yo me quedaré en el templo estudiando.
DÍA 42:
Anoche volveron de una partida de cartas o algo así y trajeron mucho dinero y un mapa de una isla, que he buscado por todas partes del templo de donde es y no he conseguido nada de información. Por otro lado he conseguido encontrar un mapa de un mar con el mismo nombre que la palabra y que no conocemos en el templo, y que temo que pueda ser del plano mundano, o algún otro sitio al cual no podemos ir.
DÍA 43:
He dedicado todos mis esfuerzos  encontrar alguna forma para ir a a ese lugar, y no he tenido mucho éxito, pero en cambio he utilizado una bendición de Lankor Mhy para poder ver la historia del mapa, que trajeron mis compañeros y efectivamente el mapa viene de un lugar muy lejano, y su dueño vino en barco a través de una misteriosa niebla y naufragó, así que han ido al puerto a averiguar algo, y según han salido disfrazados de iniciados del templo y en poco tiempo he oído gritos fuera, me he asomado a la ventana y he visto a una persona sangrando en el suelo, y una señora hablando con un guardia y señalando hacía el templo, la elfa draconizada ha vuelto a hacer de las suyas, siempre pega cuando tiene que dialogar e intenta dialogar cuando tiene que pegar.
Poco más tarde ha venido el guardia y me ha hecho unas preguntas  y se ha ido, al poco me ha dicho el sacerdote que saliera corriendo de la ciudad y eso hemos hecho hemos cogido los trastos y no hemos ido en mi carro y hemos salido corriendo, con las prisas he tropezado y me he caído, pero me han ayudado y nos hemos ido corriendo. Parece ser que algún guardia nos ha visto y nos ha seguido y en la puerta han llegado donde estábamos en una cola de carros para salir, ya que iban comprobando una por uua las personas que salían de la ciudad, y nos ha detenido cuando  nos han visto, y nos han llevado a una celda al cabo de las horas han traido a la dracónica y a Shack, hemos tenido una pequeña pelea con el guardia pero en se guida han venido refuerzos, y nos hemos rendido, después nos ha torturado para saber que nos habámos hecho en el mito porque ya no podían controlar bien a los no muertos como antes, y nos culpan a nosotros. Al final les he dado mi diario lo han leído y nos han soltado, pero nos hemos enterado que tenían un espía así que hemos cogido trastos y hemos ido al puerto a buscar al hombre que les dió el mapa, y cuando hemos llegado a su casa estaba en llamas y hemos ido corriendo a ssacarlo, lo han sacado vivo por los pelos, pero una mujer encapuchada les ha empezado a disparar desde un tejado y hemos conseguido irnos corriendo, al final hemos tenido que dejarlo en miitad calle, ya que por lo visto también nos perseguía la guardia porque, la dracónica había matado al una persona, y hemos corrido hacía el puerto para buscar un barco y salir corriendo hacía algún sitio con nieblas permanentes.
Hemos recorrido muchos barcos, pero al final hemos conseguido un barco y menos mal, porque había una legión de zombis siguiéndonos y el capitán al ver que la mujer encapuchada, sí también estaba allí (¿porqué todo el mundo nos odia?), había matado a su vigía hemos salido corriendo, hemos salido destino a las islas occidentales, donde repostaremos.
DÍA 44:
Hemos llegado a la isla, y solo vamos a estar unas horas por si llegan los piratas, lo suficiente para aprovisionarnos y conseguir información, Himladaru ha hablado con un barco de Aldryanis y le han dicho que su dríada sabe como llegar al sitio donde tenemos que ir.
DÍA 45:
Hemos llegado  a la isla de los elfos, el sitio es peculiar unas pocas chozas para el comercio con los barcos que vienen por aquí, y una condición es que no podemos pasar de una hilera de piedras, les hemos dicho lo que necesitamos, y nos han dicho que esperemos unos días que tiene que ir al poblado y preguntar si podemos ir.
DÍA 46:
Porfín ha llegado el aldryani y nos ha dicho que vayamos con ellos. Nos han guiado por el bosque hasta un precioso pueblo que estaba en lo alto de los árboles, nos han dicho que dejásemos las cosas en un árbol, y si queríamos podríamos dar una vuelta por alrededor de la ciudad, pero bastante alejados de esta, ya que no podemos pasear por ella, elelfo que nos guiaba ha estado tocando plantas, y yo tomando notas de la flora y fauna que había.
DÍA 47:
Nos ha llamado el chamán para hablar con nosotros, y le hemos dicho que buscamos a un ser caótico que va hacía Glorantha y que no habían dicho que su dríada sabía como ir. El shamán nos dijo que la mujer caótica pasó por aquí con un ejercito y que lucharon con ella, hasta que se fue, y que desde que se fue no saben nada de su driada y que su invierno es ahora muy duro, y que teníamos que ir a buscarla al lugar donde el frío es más intenso, asíq ue saqué el manto, sombrero,y abriigo de invierno, y las raquetas por si hay nieve. No quiero que me pase lo mismo que en la boda Orlanthi. He hablado con ellos y me he hecho seguidor de Aldrya, ya que me fascina la forma de vivir de los aldryanis, la ceremonía ha durado un buen rato y como agredecimiento le dí una flauta exquisita de hueso de dragón. Y poco después hemos partido hacía allí el guía nos ha dicho que tardaremos 3 días a nuestro paso.
DÍA 48:
Hace un frío brutal, se ve que Valind se ha enfadado con esta parte del mundo, porque no es normal este frío en una zona tropical. Hemos estado todo el día por la nieve y los marineros que hemos contratado en el barco están aguantando bien.
DÍA 49:
Está todo solucionado o eso me parece, pero me he quedado tullido de la mano izquierda. Estábamos caminando por la nieve en mitad de una tormenta de nieve, íbamos atados con dos cuerdas para no perdernos, de repente el guía cayó casi muerto frente a un monstruo caótico, ya que lo primero que hice fue preguntar a Kark y él me lo ha confirmado al instante. Grité al instante alertando toda la compañía, ya que iba detrás del guía caído y el siguiente era yo, Luthien de forma rápida se deshizo de él con la ayuda de Irkani. Mientras curaban al guía me avancé un poco y acto seguido un árbol gigantesco se empezó a mover hacía nosotros moviéndo sus raíces  y con unos aldryanis colgando de sus ramas, tuvimos que enfrentarnos con ellos, conseguimos derrotarlo entre todos, pero los marineros fueron los que sufrieron más, ya que fueron heridos, y a Shack lo tiraron varias veces al suelo.
Con la ventisca decidimos avanzar hacía un templo cercano que había a unos 100 metros, pero al paso que iban algunos íbamos a estar mucho tiempo andando en tal malas condiciones, así que el guía creó una esfera de calidez y dejó allí a los que estaban extenuados por la condiciones climatológicas, ya avanzamos los que pudimos menos Luthien que se quedó con ellos.
Llegamos en poco tiempo al templo, y escuchamos unas risas perturbantes de mujer,resultaba ser un espíritu del invierno que había hecho que se fuera la dríada, Shack le dijo algoq ue le enfadó y le descarnó, después Shack me miró con ojos lascivos y entendí que le había poseído y me clavó la lanza corta de Shack en el brazo izquierdo de forma que caí inconsciente, lo siguiente que recuerdo es despertarme al aire libre, sin ventisca en la esfera de calidez y con el brazo tullido, así que lanzazo de Shack fue impresionantemente fuerte y destructivo.
DÍA 50
Me levanté fuimos hacia el templo de nuevo, ya que me dijeron que habían hecho que el espíritu se fuera y les dijera que la dríada estaba bajo el estanque congelado del templo. Cuando llegamos, encontramos el lugar la elfa colocó la oreja sobre el hielo y escuchó corriente baje la placa de hielo, entonces Irkani cogió su martillo y empezó a romper el hielo, que costó más de la cuenta, el una vez quitada la placa de hielo el aldryani nos dijo que teníamos que esperar, que volvería a brotar con un poco de luz, así que se me ocurrió hacer un hechizo de luz cerca de las ramas y la raíz de la dríada, mientras empezaba a brotar poco observé el templo por si me sonaba algo los dioses que allí habían, pero deberían ser tan antiguos que no los reconocí.
Al final la dríada brotó de la rama cogiendo forma humanoide, y nos agradeció lo que habíamos hecho, y nos preguntó en que podía ayudarnos, le dijimos que debíamos atravesar la niebla, y nos dijo un mito que se nos quedó incrustado en la cabeza con fuego, decidimos descansar unas horas allí ya que estábamos fatigados por la nieve y los combates, mientras la dríada salió y del templo y por el camino que habíamos venido empezó a caminar de forma que la nieve se derretía a su paso y salía vegetación y florecía a su paso.

El mito era el siguiente:
“En el Alba, se le permitió a Eron mirar los ojos de Halamalao. Su iluminación le confesó que debía cruzar el mundo de un extremo a otro, y de este a oeste para llevar la Vida con él, para aquellos que habían perdido su camino y adorado a los dioses paganos. Así, Eron sobrevivió a la tierra y su enormidad.  Al norte estaba InIri la Diosa del Hielo y ella no escucharía la Palabra. Al sur estaban las montañas y no podía moverlas. Tras él estaba la tierra de Fronela y era un tramo muy vasto que no podía recorrer. Eron habló con Halamalao de este dilema: “deseo llevar tu Palabra al mundo, pero el mundo es demasiado grande  no podré completar la tarea si tengo que caminar. Si vuelo no tendré mis pies sobre el suelo y no lo entenderán las razas comunes. Necesitaré ayuda para llevar tu Palabra a todo el que deba oírla”.
Durante mucho tiempo no hubo respuesta, así que Eron comenzó a caminar hacia el este, a través del viejo reino de Akem, donde llevó la Palabra de la Creación a ese reino. Caminó muchas, muchas millas y sus pies sangraron, porque no podía llevar zapatos y sus pies iban siempre por el suelo. Cuando no pudo andar más, se sentó en una piedra y miró al este, comenzando a desesperarse por la enormidad de su tarea y las tierras que aún le quedaba por cubrir.
Entonces las nubes se dispersaron y una luz que cegó a todos excepto a Eron, descendió del cielo y golpeó el suelo lejos, muy lejos al este, donde Eron conocía un tranquilo lago. La luz se movió hacia él,  ondulando cuando los vientos fríos de InIri intentaban desviarla y la movieron formando un profundo y curvado canal en la tierra. En un día, ese canal fue tallado desde el Mar Dulce hasta la Bahía de Ozur y esa tarde, Eron viajó por él. Aldrya dejó pasar las aguas por el canal convirtiéndolo en un río que llegaba hasta el Mar de Neliomi. Eron viajó por él fácilmente y llevó la Palabra de Vida y de Creación a todos los hijos de Aldrya. “
Cuando bajamos de la montaña y llegamos al poblado no había nadie, y cuando llegamos con el shamán, solo estaba el gato que debía ser su fetch, por lo que supuse que estábamos en otro plano, y efectivamente nos dio otro brebaje y despertamos junto a 800 peniques y un conjuro de traspasar antiguo de bastante poder (magnitud 4). Acudí a un jardinero para ver si me podía curar el brazo tullido, y me dio la bendición de Aldrya, y me dijo que germinaría en 11 días y que no debía hacer nada ni recibir golpes en ese brazo y así nos fuimos al día siguiente.
DÍA 51:
Ya hemos llegado de la aldea de los aldryani, y hemos vuelto todos, hemos hablado con el capitán y hemos negociado otro precio, para ir donde queremos, nos ha comentado que hay un barco a lo lejos que no se acerca la costa pero que parece que les vigila.
DÍA 52:
llevamos 12 días de viaje y ya vemos la niebla y tenemos que empezar el ritual del mito, el barco no nos ha dejado de seguir en ningún momento, es más el capitán se la ha jugado para que no nos alcanzasen y por suerte el barco ha aguantado.

Hemos hecho bien el ritual,  hemos atravesado la niebla debido a que conseguido hacer el mito bien, pero el barco a quedado muy dañado y los elfos ahora tienen más aspecto Aldryani si cabe. A lo lejos hemos divisado tierra, y nos movemos gracias a unas ondinas, pero nos faltan un par de mástiles, nos hemos cruzado varios barcoas de camino al puerto uno de ellos de aldryanis que nos han dicho, que estamos en la Isla de los Grifos. Hay varios barcos Orlanthis, y uno mostali de piedra.
Cuando llegamos al puerto se acercó una barcaza a pedir impuestos por atracar, o eso pienso ya que se metió en el camarote del capitán a hablar. Los soldados que le acompañan están muy bien armados y parecen del panteón solar por la forma de vestir.

17/07/2013 (Tierra)
Día Divino Semana de la Ilusión Estación de las Tormentas
Tras esperar dos días a que el elfo hablara con el chamán, el grupo de aventureros permanece en el puerto. Algunos de ellos matan el tiempo entrenando habilidades y otros simplemente dejan pasar el tiempo. Cuando por fin aparece el embili, éste les da la grata noticia de que su chamán les estaba esperando. Tras atravesar un espeso, húmedo y oscuro bosque, pasan la noche en uno de los troncos donde habitan los elfos a condición de no perturbar nada. Antes de dormir, el guía elfo les llevó orgulloso a que admirasen las plantas del bosque, aunque su mirada albergaba tristeza. Alrik recogió en sus notas dibujos de todos aquellos parajes. Al amanecer de ese día, se reunieron con el chamán. Una especie de gato les invitó a sentarse y de pronto, el gato salió corriendo y el chamán comenzó a hablarles. Al parecer, tras la llegada de la intrusa Gábriel, había dejado de escuchar la canción del bosque. Esa mujer había traído algo maligno que había modificado el comportamiento habitual del bosque. Ese frio extraño para esa época del año podría ser un indicio de ello. El chamán había suplicado ayuda a Aldrya y ella había traído a los aventureros. En uno de los momentos durante la charla, Alrik e Irkani cayeron inconscientes. Luego, el marino Plum y finalmente Luthien. Esta última, pudo contemplar la belleza de Aldrya junto a un ejército de elfos. Ella le mostró ese mal, convertido en llamas y que todo lo arrasaba.
Tan pronto como pudieron, partieron junto a unos cuantos marinos que contrató Alrik por 2MP al día y el guía embili. Tratarían de llegar hasta la dríade, pues sólo ella era conocedora del mito que les llevaría al otro mundo. A cada jornada el frío se acrecentaba.
Los elfos no tenían problema alguno, sin embargo los humanos sufrieron todas las desdichas de ese inestable tiempo. Sólo permanecían confortables cuando el elfo realizaba el conjuro de calidez. Cuando estaban próximos a su destino, el viento era tan huracanado que tuvieron que atarse unos a otros con una cuerda para no perderse. De pronto, el guía gritó que la Dríade no estaba en su árbol. Inmediatamente, un ser inerte, que antaño fue un elfo se aferró al cuello del guía dejándolo inconsciente. Los aventureros comenzaron a cortar las cuerdas. Alrik reculó hacia atrás en cuanto pudo, Plum se quedó paralizado por el miedo, Luthien sacó las garras y avanzó hacia su enemigo hiriéndole en el abdomen. Tras unos cuantos golpes consiguió inmovilizarle. Durante unos instantes dudaron si ese engendro podría tratarse de la dríade, pero todo apuntaba a que eso no era posible. Entonces Irkani cegado por su fe, atacó con tal fuerza al no muerto, que Luthien recibió un pequeño golpe en el brazo izquierdo con el que lo estaba inmovilizando. Tras eliminar al enemigo, la elfa tomó su lanza y se dirigió hacia el guía para curarle. Sin darse cuenta, Alrik había comenzado a caminar hacia el gran árbol. En cuanto el guia recobró la consciencia vio como el sabio caminaba sólo y les advirtió que debían permanecer juntos. Y así fue como se hizo. Los aventureros estaban delante de ese grandioso arbol. De una liana colgaban los cuerpos sin vida de varios elfos. De pronto, el árbol comenzó a moverse...
25/07/2013
El árbol y los esbirros que tenía colgando de sus ramas formaban parte del Caos, eran muy peligrosos, pero el Gran Dragón estaba en mí. Hay momentos en los que dudas si debes arriesgar la vida, pero luchar contra el Caos era imprescindible para el renacer del Dragón Cósmico. Yo he de permanecer más tiempo en este cuerpo mundano, el necesario hasta que alcance la trascendencia. Por eso el Botero de la Penumbra vela por mi supervivencia, porque todos merecen una segunda oportunidad. Por eso hoy, no siento miedo.
Me acerqué al árbol de proporciones desmesuradas atacándole a las raíces con mis garras. Los aldryami sin vida que colgaban de las ramas comenzaron a atacarme desde lo alto con sus lanzas largas, obligándome a esquivar los golpes. Observé como Artuk hería al árbol con su daga mágica, y éste, furioso, dirigía sus golpes hacia el acólito, con tanta suerte que sus ramas quedaron atrapadas en la nieve. Yo que estaba rodando por el suelo intentando evadir los golpes que venían desde el cielo, comprendí que era el momento de atacar al tronco del árbol, pues ya había comprobado que ese líquido negruzco que escapaba por la corteza era el que daba fuerzas a ese engendro. Así que me puse en pie y comencé a atacar con todas mis fuerzas a su tronco. Primero, las ramas se dirigieron a por mí y de nuevo quedaron atrapadas en la nieve, cuando me aparté de su trayectoria. Cuando el árbol comenzó a estremecerse de dolor, puse toda mi furia sobre él y le ataqué una y otra vez con las garras hasta que dejó de moverse. No habíamos llegado a cortar el tronco, aunque ya estaba bastante tocado, y el tiempo corría en nuestra contra, debíamos encontrar a la dríade. De pronto, escuché unos pasos pesados en la nieve. Cerré los ojos y presentí ira en el ambiente, pero sólo el silencio reinaba allí. Sin duda se trataba de Irkani el Mudo. Abrí de nuevo los ojos y vi como el humano golpeaba el tronco con su martillo. Finalmente, consiguió partir el tronco, pero Irkani que ya estaba bastante fatigado, cayó rendido. El guía aldryami nos habló de un templo que no estaba demasiado lejos. Allí podríamos refugiarnos del vendaval que nos estaba azotando. Tras lanzar una esfera de calidez, Irkani y uno de los marineros, creo que se llama Plumb, se tuvieron que quedar, pues la fatiga no les permitía avanzar. Para el bien del grupo, consideré que debía quedarme junto a ellos mientras el resto avanzaba a buscar refugio en el templo. Aproveché esos momentos para curar las heridas que cubrían mis brazos. Tuve oportunidad de observar como los humanos que estaban a mi lado se encomendaban a sus falsos dioses. Cuándo se darán cuenta que eso en lo que creen son en realidad dragones…Al menos, algunos parece que cada vez prestan más
atención a mis enseñanzas. Sí, todos y cada uno de nosotros contribuiremos a la causa.
Mientras pensaba todo esto, Plumb nos alertó de que había escuchado unos gritos pidiendo ayuda. Yo comenzaba a estar nerviosa, pues había estimado que el guía debía estar ya de vuelta. Les dije que no se movieran de la esfera y salí corriendo guiándome por las huellas o lo que se podía ver de ellas. Entonces me encontré con unos marineros que huían despavoridos, diciendo que una bruja había poseído a alguien.
Seguí corriendo dejándolos atrás y cuando llegué, Artuk y Shak estaban tendidos en el suelo. El guía aldryami me dijo que había conseguido disiparla, pero por si acaso ese espíritu lo había poseído a él intenté engañarle diciéndole algo sobre su dios Flamal. El guía me dijo que su Diosa era Aldrya y además sabía dónde había dejado la esfera de calidez. Parecía que estaba diciendo la verdad. Sin embargo, cuando nos introdujimos en la esfera, el guía comenzó a sudar de forma bastante sospechosa. ¡La bruja lo había poseído! Pese a que Irkani estaba muy cansado, pudo sacar a su espíritu que comenzó a enfrentarse a ella. Yo después de curar a Shak para que despertara de la inconsciencia, intenté que uno de los marineros lanzara magia sobre mis cuchillas para así poder enfrentarme a ella, mientras Shak me pedía que sacara la lanza que tenía clavada Artuk para así poder curarle. Dada la tensión del momento, le dije que se encargara de essssso uno de lossss marinerosssss. Y la magia que requerían mis cuchillas no llegaba…así que me atreví a sostener entre mis manos la daga mágica de Artuk. Sé que no hice lo correcto, pues el metal es la sangre de los falsos dioses paganos, pero el Caos también lo era, así que no tuve elección. Gracias a la visión de las almas que me lanzó Irkani, pude ver a esa bruja cara a cara, asestándole varios golpes con la daga. El espíritu murciélago mordía sin cesar al espíritu del frío y finalmente conseguimos que se disipara. Antes de eso le pregunté por la dríade y me dijo que estaba en el agua del templo. Cuando se marchó, la prioridad era curar a los heridos. Vi que Artuk seguía con la lanza clavada y con convicción se la arranqué de un tirón.
Creímos necesario que debía curarle y así lo hice, acercándolo un poco más si cabe hace el Gran Dragón.
Más orgullosa me siento de Shak, que parece que comienza a vislumbrar la existencia de los dragones. Hoy me ha pedido sin pudor, que curara sus heridas. Yo ya empiezo a ver cambios sutiles en su cuerpo. Le he estado observando y le ví desmoralizado durante la lucha contra el árbol, al ver que su Dios no le proporciona el poder que el requiere. Por eso parece que le atraen cada vez más mis conjuros…creo que avanzaremos más en el viaje hacia esas tierras extrañas.
27/07
Rápidamente nos dirigimos al templo. En su interior vimos una especie de estanque del que salía una rama seca que ascendía por su pared frontal.
Pensamos que se trataría de la dríade, y por su aspecto no parecía que estuviera muy saludable. El guía nos dijo que había que sacarla de allí, pero había un pequeño problema, el agua estaba congelada. Situé mi oído sobre el hielo y pude escuchar como el agua corría, lo cual era un indicio de que no estaba totalmente congelado en todo su espesor. Se
lo comuniqué al grupo, y comenzaron a picar con el martillo. Costó más de lo que imaginamos, pero finalmente pudimos sacarla. Después observé como Artuk hacía un conjuro de luz sobre la rama, de la cual comenzaron a brotar hojas. Pronto, de la zona más cercana a nosotros se formó el cuerpo de una mujer, que nos agradeció haberla ayudado.
Ella a cambio nos mostraría como cruzar al otro mundo.
La seguimos y pudimos observar como todo florecía a su paso. Cuando llegamos hasta el poblado, vimos una cantidad de espíritus enorme vagando por allí. ¿Quizá se tratase de algún ritual desconocido para mí? De nuevo estábamos con el chamán. Ahora el gato ya no hablaba, pegó un brinco mientras maullaba y los cuencos del brebaje que bebimos estaban tirados en el suelo. Las palabras del hombre resolvieron todo el misterio en torno a los espíritus. Nos había introducido en una búsqueda espiritual sin cerciorarnos, amén de nuestra posible reacción. Sólo estando en el plano espiritual podíamos enfrentarnos a los espíritus.
Una vez superada esta parte, sólo nos quedaba enfrentarnos a la no menos peligrosa búsqueda para cruzar al otro lado. Entretanto, unos descansaron, los jardineros intentaron regenerar el brazo de Artuk, pero aun restarían unos cuantos días hasta que lo recuperase del todo. Yo me pasé la mayor parte del tiempo meditando. Tenía que estar preparada para el ritual, ya que yo fui la elegida para llevar a cabo la búsqueda. Una y otra vez repasaba en mi cabeza el mito:
Finalmente, tomamos el barco rumbo a la niebla, y aquel navío que venía siguiéndonos volvió a dejarse ver tras nuestra estela.
Era el momento, el ritual comenzó y atravesamos la niebla dejando atrás a aquellos que querían nuestro mal. Seguimos todas las estaciones tal y como habíamos aprendido. Yo, tomando la forma de Aroka puse todo mi empeño en superar todos los obstáculos que se nos ponían por delante. Algunos de mis compañeros no tuvieron tanta suerte, y con la sangre que brotó de sus heridas cumplimos otra parte importante del ritual. Aquel Luathan dorado que tiraba de nuestro barco, nos dirigía hacia lo que parecía una cascada. El miedo se olía en el ambiente cuando comenzamos a caer por aquella espiral perdiendo totalmente la noción del espacio y del tiempo. Comenzamos a caer en vertical, sentí también que nos enderezábamos y justo al fondo, observé al Gran Dragón Cósmico e incluso un poco más allá, a Ouroboros. ¿Sería parecida esa sensación a la del trascender del alma? Alcé mi mano para tocarle, pero en ese instante volvimos a navegar en horizontal por las aguas. El griterío de los marineros me devolvió de nuevo al mundo de los sueños, sacándome de la realidad más tangible que pudieran observar mis ojos. Todos experimentaban felicidad por el triunfo. Yo no esperaba otra cosa. El poder que nos confieren los dragones es superior al de cualquier otro ciego. Por eso, esta vez salimos victoriosos. Antes de poder observar mis cambios fisiológicos, sentí sensaciones que jamás había experimentado. Todo a mí alrededor era vida. En su día fui repudiada del Bosque de Arstola porque no podía escuchar a Seyothel, estaba desenraizada. Entonces fue cuando el Gran Dragón Jarn me mostró la senda y ahora... ¿Ahora me otorga aquello de lo que fui separada al nacer? Observé entonces mis manos, mis brazos, mi cuerpo...todo había cambiado. Era difícil concentrarse con todas aquellas sensaciones a mi alrededor. Pero si él me había dotado de ello debería acostumbrarme.
El Sol lucía con fuerza, y el navío avanzaba cortando las olas en aquel océano, repleto de peces, repleto de plantas, repleto de vida...Habíamos partido de la costa este de Genertela ¿A qué lugar habíamos llegado? ¿Podría ser alguna isla de Vithela?

Cuando entramos en el puerto varios barcos nos daban la bienvenida. En uno de ellos, unos aldryami nos saludaron y nos dieron la bienvenida a la Isla de los Grifos. Nunca había estado aquí y si me dieran un mapa de Glorantha, no sabría ubicarla. Sobre un acantilado se levantaba una construcción enorme. Dejé en manos de mis compañeros todos los asuntos burocráticos, yo estaba demasiado ocupada en entender el significado de todo lo sucedido. Ya en la taberna, me interesé por saber si en esta Isla había llegado con anterioridad a mí el poder del Imperio. Cuando aquel hombre pronunció por su boca que hacía tiempo que el Imperio había caído, sentí ganas de cortarle la cabeza con mis garras. ¿Cómo se atrevía? Según fui escuchándole temí que aquello que me decía pudiese ser cierto. Al oír que un templo de Lankor Mhy se hallaba a pocos días de aquí, estuve a punto de partir para poder averiguar si todo era cierto. No es propio en mi dejarme llevar por las emociones ¿Será este nuevo estadio el que me fuerza a actuar así? De nuevo volví a la meditación y conseguí calmar esas proyecciones externas. Todo debía suceder a su debido tiempo. Todas las conjeturas y preguntas que me rondaban tendrían que esperar ¿Sería otra vez esa pelirroja y ese malnacido aprendiz de dios los que habían truncado la historia con sus malas artes? Una vez ya alteraron un mito y con ello la historia de Glorantha ¿Habría sucedido esta vez lo mismo? ¿Cuántos años habían transcurrido desde que atravesamos la niebla?
31/07
Las dudas seguían atormentándome…entre las paredes de la taberna repasé mis anotaciones y no conseguía entender nada de lo que allí había escrito ¿Qué lugares eran aquellos que yo misma había mentado? ¿Habría estado sometida a algún conjuro de ilusión? Necesitaba respuestas.
Bajé de la habitación y pregunté al tabernero por el calendario que usaban. Al parecer, el Calendario Zaringa, tenía las mismas estaciones que nosotros, sin embargo el año se medía en función de la entrada de Zar en la Isla, nada tenía que ver con nuestra medida de los años en Genertela. O sea, que seguía sin respuestas. Mi otra preocupación era dar con la caótica ¿Qué tenía aquella Isla de especial para ella? ¿Quizá si averiguaban su objetivo podrían encontrarla más fácilmente? Tal vez Artuk supiera algo…
Allí estaban los dos, Shak y Artuk. Me acerqué a ellos y les comenté todas mis ideas. Pensé que ellos podrían ayudar, sin embargo, pareciera que no les importara en absoluto lo que les estaba diciendo. No soy dada yo a los arrebatos de cólera, pero en ese momento consiguieron enfadarme. Mi Imperio estaba en el olvido, la búsqueda de la vingana era una tarea altamente costosa y para colmo, estas sensaciones me apartaban del verdadero sueño. Unos sollozos agónicos interrumpieron nuestra conversación. Salimos rápido para ver que sucedía, y observamos un grupo de gente trasladando un cadáver. La tristeza se olía en el ambiente. Las mujeres lloraban y suplicaban por “Llama Eterna”. Las calles eran irregulares y en un pequeño traspiés casi imperceptible, se dejó ver parte de la mujer que yacía bajo las sabanas.
Cuando vimos aquel tono de cabello nos miramos al unísono. Todos pensamos lo mismo…
Seguimos a la comitiva hasta el templo que habían alquilado al Plutarca.
Averiguamos que adoraban al credo de Orlanth, y tras muchas reticencias por parte de aquellas gentes, encontramos a un hombre, algo más deslenguado, que nos dijo que aquella mujer era una amazona. Al parecer las amazonas eran aliadas de los Zaringas (descendientes de los primeros nativos de la Isla).
Los días en Puerto Soldado seguían pasando. Artuk marchó un tiempo al templo de Lankor Mhy para celebrar la Estación Sagrada. Para decepción mía, Shak también partió buscando un altar de Odayla. Creí que había vislumbrado al mismo Ouroboros, ¡pude verlo en sus ojos!…¿lo habrá olvidado también?
Heffist y yo nos hemos quedado recabando información sobre Puerto Soldado. Para nunca haber estado aquí se sabe mover muy bien por los bajos fondos y hemos obtenido información muy valiosa. Jamás pensé que diría esto, pero su compañía me es grata. Es eficiente y no habla demasiado. Puede que al principio le juzgara demasiado a la ligera…Todos sabemos el daño que los Mostalis provocan en la naturaleza. Su esfuerzo en vano por recuperar su Máquina del Mundo ha causado estragos. Pero este Mostali de Plata parece ajeno a todo eso. Quizá tampoco siga la senda de Mostal, al igual que yo tampoco seguí la de Aldrya. O tal vez se trate de un Aperturista…no sé, pero por ahora no ha creado discordia en el grupo.
Hoy nos hemos reunido todos y hemos intercambiado los datos obtenidos. Shak ha llegado sangrando. Tenía una grave y dolorosa herida en la pierna. Lo he sentido cuando le he tocado para curarle ¿Esas son
las recompensas de Odayla? Si él quisiera yo le convertiría en un verdadero cazador. Igual si voy yo a enfrentarme con el perro del zaringa me gane su respeto…
8/8
Estábamos en el mercado del exterior cuando los paganos de Orlanth comenzaron sus canticos y bailes bajo las nubes.
Todo transcurría con normalidad hasta que la tormenta se fue desarrollando y los rayos comenzaron a caer sobre nosotros. Uno de los iniciados fue alcanzado y murió en el acto. Otro me alcanzó a mí en el brazo izquierdo, dejándolo totalmente quemado y paralizado. Por suerte, no me había herido en otro punto más vital. Gracias a la fuerza de los dragones y también a la magia del mostali, conseguimos atravesar el portón que nos separaba de la ciudad. Allí los rayos no podían llegar, pues los sacerdotes de Yelmalio protegían a Puerto Soldado del mal que traía el cielo.
Me dirigí a la posada y allí sané mis heridas. Durante unos instantes, perdí la concentración cuando Heffist sintió imperiosos deseos de visitar la bodega. Sin duda, me tengo que acostumbrar a sus rarezas. Entre tanto, todavía no teníamos noticias de Artuk. Sólo deseaba que hubiese llegado hasta el templo y estuviera a salvo. Cuando terminé de curarme, el mostali estaba en un estado de embriaguez preocupante y Shak se quedó con él. Yo no podía perder el tiempo. Cada cual es dueño de sus actos. Salí para intentar averiguar si esta situación se daba con frecuencia o era un hecho aislado. Al parecer no era la primera vez que pasaba, pero tampoco sucedía con suficiente frecuencia para considerarse normal. Nos reunimos todos delante del portón y cuando cesó el peligro y lo abrieron, salimos hacia el templo para encontrarnos con Artuk.
Por fin los máximos responsables iban a reunirse para determinar que estaba causando estos hechos. Yo tenía claro que el Caos que esa mujer había traído podía ser devastador. Y no sólo eso. Quien sabe lo que ese Aprendiz de Dios podría haber cambiado en el mito.
Hicimos noche al lado del templo.
Una de las seguidoras de Babeester Gor se acercó para molestarme cuando canalizaba mi energía con la de Ouroboros. He de andarme con cuidado en esta Isla. Está claro que el Imperio ha tenido un fuerte declive en esta zona y yo me encargaré de que renazca. Pero tendré que hacerlo con mucha paciencia y mucho tiento. No debo suponer una amenaza para ellos, sino una esperanza.
Tenemos otro grave problema que me preocupa bastante. Artuk tuvo un percance con los trilanceros y quiere partir de Puerto Soldado. Hace un momento, Shak y yo hemos estado en el mercado principal para comprar algunos pertrechos antes de marchar. Pero yo no lo tengo del todo claro. Creo que nos convendría pasar una temporada en esta
ciudad, buscar un oficio y con el tiempo encontrar gente de confianza que nos pueda ayudar a saber por dónde empezar.
Estoy bastante alterada. Artuk ha sido atacado. Por suerte un votanki le salvó la vida y le devolvió el mapa que al parecer intentaban robarle. ¿Qué podemos hacer ahora? A alguien le interesa algo de nosotros. No hay nada más peligroso como tener un enemigo al que no conoces. Sería importante que Artuk hiciera una copia exacta del mapa y otros escritos importantes. Nuestro siguiente paso, buscarnos una coartada. Me he dado cuenta que nuestra llegada a la Isla ha causado mucha expectación, hace mucho que nadie llegaba desde fuera y eso parece que les altere. Así que será mejor mentirles.
23/08
Después de comprar las armas en el mercado principal de Puerto Soldado, regresamos a la posada para recoger todos nuestros pertrechos, ya que nos disponíamos a partir de esa ciudad hacia El Gran Dragón sabe dónde. Y es que a Artuk lo habían desterrado tras el enfrentamiento con los trilanceros de la entrada.
Al entrar en la posada, Heffist se ha empeñado en jugar esa partida que tenía pendiente con el posadero. Para no perder el tiempo, yo he subido a las habitaciones para recogerlo todo. Algo muy extraño he observado, pues las mesillas de ambas salas estaban forzadas ¿Alguien nos ha intentado robar? Bajé a comunicárselo al posadero, pero él no había visto nada. Posiblemente habrían trepado por el tejado ¿Qué querían de nosotros? Entonces, escuché a unas personas que estaban sentadas en una mesa, decir que hacia Surlt se estaban preparando las tropas para la batalla, que en el este había ríos contaminados y que se habían visto caravanas de Slarges. Con toda mi buena intención me acerqué a ellos para ver si me podían informar de dichos acontecimientos, pero cuando mencioné que venía de fuera de la Isla y que no conocía bien el territorio, se levantaron rápidamente y yo creo que cuchichearon algo con el posadero. Este me lo negó, pero no confío en él ni en nadie de esta Isla. Comencé a atar cabos y estaba visto que querían algo de nosotros ¿Estarían todos compinchados? ¿Debíamos huir o quedarnos para desentrañar todo aquel misterio? Todas estas dudas que me asaltaban se las expuse a Heffist, y llegamos a la conclusión de que sería mejor quedarnos en la ciudad. Así que pensamos buscarnos una coartada para comenzar a infiltrarnos entre sus gentes y qué mejor que presentarnos ante el gran Plutarca Maugre.
Ante la torre habían apostados varios guardias que nos impidieron el paso y nos preguntaron para que queríamos audiencia con el Plutarca.
A mí se me ocurrió decirles que éramos mercaderes que deseábamos llevar a cabo un negocio con árboles. Por supuesto, dado que soy aldryami, se me quedaron mirando de forma extraña y dudaron de mis palabras. Intenté justificarme alegando que no trataba de cortar árboles, sino tomar las ramas que estaban muertas y fabricar tejados con ellas. Pensé que los solares estaban más familiarizados con el comportamiento de los embyli, pero visto está que no tienen ni idea. Parece que la propuesta de Heffist acerca de las excavaciones para obtener gemas y piedras preciosas ha calado mejor en ellos y un trilancero de más enjundia ha salido para hablar con nosotros. Parecía que íbamos por buen camino, pero este hombre nos ha dicho que sólo podíamos presentarnos ante Maugre si teníamos algo que mostrarle. Así que no podíamos hablar con él. Luego el trilancero nos ha dicho si nos interesaba un trabajo como mercenarios. Heffist y yo nos miramos y evidentemente aceptamos, pero todo era una treta para averiguar nuestras verdaderas intenciones. Pero entonces aproveché el momento para retarle a un combate y así podría valorar si era lo suficientemente buena luchando. Yo iba con mis manos desnudas, él portaba lanza y escudo. El trilancero me atacó pero yo lo detuve y aprovechando su inercia lo tiré al suelo. Los demás guardias no pudieron aguantar la risa. Me lancé pronto al ataque ahora que mi contrincante estaba en el suelo, pero sorprendentemente paró mi embestida. Rápidamente volvió a lanzarme otra estocada desde el suelo, pero esta vez conseguí agarrar la lanza y quitársela. Los guardias reaccionaron al unísono señalándome con las puntas de sus lanzas, y yo respondí dejando caer la lanza a los pies de su dueño. Para demostrar mis buenas intenciones, le di la mano al trilancero para ayudarle a levantarse y este la aceptó. Parecía un hombre honorable. Me preguntó si Heffist sabía luchar igual que yo, le miré y me sorprendió su reacción, pues cuando le miré estaba confuso, con esa cara que pone cuando algo no le sale bien y al escuchar al trilancero, se giró y dijo que luchaba aún mejor. Yo enarqué las cejas y sonreí. Sin duda ese mostali era la monda. El trilancero nos dijo que volviésemos en unas horas…
Marchamos a reunirnos con Artuk. No sabía cómo iba a reaccionar, pero éramos varios los que veíamos lógico quedarnos. Cuando le vimos, observamos que su abdomen tenía una fea herida. Intentamos ofrecerle
nuestras curaciones pero no las aceptó. Heffist se empeñó en que debía ser reparado y no paraba una y otra vez de repetirlo. Mientras, el herido, me contaba que quisieron robarle el mapa y algunas otras cosas. Gracias a la intervención de un nativo consiguió el mapa y mantener su vida. Luego intenté convencerle de que era mejor quedarnos un tiempo en Puerto Soldado hasta averiguar más sobre la Isla. Lanzarnos a la locura nunca nos había ido bien…
Ahora estoy comprando unos protectores para pergaminos que me ha pedido Artuk. Espero que haga copias del mapa y que el verdadero lo esconda en algún lugar seguro.
23/09
Heffist y yo hemos salido de la ciudad para hacer tiempo a que los trilanceros nos atiendan. En el campo de naranjos nos hemos cruzado con un chico que intentaba robar una naranja.
Los trilanceros que custodiaban el terreno, lo han atrapado y detenido ¿Serán valiosas por alguna razón que desconocemos? Heffist ha empleado su magia de transporte para coger una sin que la vieran. Aparentemente es una fruta como otra cualquiera. Luego, nos hemos dirigido hacia la playa mala y allí hemos hablado con un pescador sobre el trabajo, sobre los navíos que viajan por la isla y sobre cómo comercian dichos barcos con los delegados de Puerto Soldado (al parecer, esas marinos nunca abandonan sus barcos y van armados. Una barca se llega hasta ellos y allí comercian. Siempre están varados mar a dentro. Destaca Flecha Corda y Fuego Espiritual). También mencionó algo sobre los surltanos y nidikanos. Dijo que los tres hermanos fundadores no se llevaban bien, que los trolls habían aprendido a meter espíritus en dinosaurios y que los trilanceros no son humanos, que tienen un gran poder que hallaron más allá del mar. Después de tan grata conversación, hemos dado un paseo por el poblado de pescadores. De nuevo, esa muchacha que se fija tanto en Irkani nos ha dado una manzana para él ¿Algo extraño pues al parecer está casada? Al final, nos hemos reunido con Artuk y con Sak y hemos intecambiado toda la información que hemos recabado. Por cierto, la fruta se la comió Sak antes de poder
entregársela a Irkani y de mágica nada. Al parecer Sak ha hablado con las amazonas de la entrada del templo y arece que nos van a dejar explicarles porque creemos que Gábriel tiene algo que ver con los rayos cayendo del cielo.
Ahora mismo estamos en el interior del templo exterior. Sin armas estamos reunidos con Ilaira (sacerdotisa de Ernalda), Morgana (también de Ernalda), Orcan (Espada de Humakt), Bogran (un tio graciosillo de cara pintada, miembro de Eurmal), Gardarg (Sumo Sacerdote Orlanthi con muy mal genio). Se me ha ocurrido que el espada de humakt podía hacernos un ritual de la verdad, para saber que todos estamos colaborando. Las sacerdotisas han sido las más receptivas con nosotros como era de esperar. Gardarg no ha creído en nuestras palabras. En el templo hemos averiguado:
- En Surlt vigilan el Caos con sus halcones.
- Hace siglos algo les aisló (METAGAME: Prohibición Sindica) dice el sacerdote de Lankor Mhy.
- Aigonus desapareció.
- Los grifos eran buenos con Zar. Luego trajeron los caballos y comenzaron a atacar. Alguien consiguió domar un grifo (Aigonus?).
- Los hijos del Zar se revelaron y Aigonus les venció.
- Los zaringas nos pueden contar leyendas.
- A lo mejor nos quieren sacrificar para averiguar cómo salir de la isla (Maugre?).
Una joven iniciada ha aparecido para darnos fruta. Ella no estaba bajo los efectos del ritual de la verdad y me he atrevido a decirles que no me fiaba de ella. La sacerdotisa me ha disuadido y finalmente cuando la joven ha pasado por mi lado para ofrecerme fruta he visto que llevaba una nota en la mano para dármela. Yo no sé leer, así que disimuladamente le he pasado la nota a Artuk y ya fuera del templo nos la ha leído: “No os fieis de algunas personas de las de la sala. TM”
TM podía ser Thomas Manover, tendremos que averiguar más sobre él.
Heffist y yo hemos vuelto a la ciudad. Los trilanceros nos han dado algunos datos sobre los lugares donde podríamos encontrar trabajo. Hemos ido a la zona de los mercaderes y hemos conocido a Gor, un mercader humano y con bigote de fumanchú. Nos ha hablado de que comercia con mostalis, pero luego parece haberse arrepentido de lo dicho. No ve con buenos ojos a Thomas Manover, pues dice que subió sospechosamente rápido de rango. Protegeremos su mercancía hasta Oackless (gobernada por un grupo de gente sin escrúpulos. Un Rey que pasa de todo. Hay trolls. Hay hechicería y objetos mágicos en esta
ciudad). Partiremos la semana del movimiento y durante unos 28 dias. Nos paga una parte al salir y otra al llegar. Artuk y Sak nos pueden acompañar. A la próxima estación el viaje será a Nidik.
Luego hemos encontrado otra tarea. Nos ha contratado un hombre (no nos dicen su nombre) durante 9 días y nos paga 2MP/día. Incluye alojamiento y manutención. Hemos conocido a un hombre de la calle con trajes elegantes pero no muy aseado (parece un farsante) llamado Erra Barbayon, es rubio y atractivo. Por unas monedas se dedica a contar historias, leyendas. Heffist le ha ofrecido unas monedas y nos ha contado la historia de un hechicero de Oackless, Alayon Bar Eco y de Aigunis Eva Cortada (Aigonus) parece que la espada la lleva este último.
Después hemos ido al templo de alquiler para ver a Thomas Manover, pero no se podía pasar. Estaba reunido con unas sacerdotisas que tenían tatuadas las runas de la Oscuridad y de la Luna. Están dando un sermón de la Oscuridad (no sabemos lo que hace TM dentro).
Al salir vimos que Sak había perdido el juicio, pues había plantado la tienda en el peor sitio posible y no entendía a razones. Comenzamos a discutir y un trilancero se acercó para ver qué pasaba. De pronto aparecieron unos tentáculos en el suelo. Vi la intención de Sak de sacar el arco, y como desvariaba intenté pararle por si hacia alguna tontería. También intenté sacarle de aquellos tentáculos que estaban aferrados a su pierna pero eran demasiado fuertes. Supongo que con las garras los hubiera arrancado, pero he de ser muy prudente con mi magia. Al final el trilancero, lo ha arrancado de cuajo. Parecen muy fuertes. Me ha parecido ver como si un fogonazo eléctrico precediera a la estocada ¿Será esa la magia tan poderosa que obtuvieron del Mar, junto a Maugre? A todo esto, Heffist le ha dado a Sak con el martillo. Ella sólo quería dejarlo incosciente, pero las cosas no se hacen así y más en esta ciudad en la que nos tienen en el punto de mira. Debemos parecer ciudadanos ejemplares y estamos haciendo todo al contrario. Así que la han detenido y la juzgaran mañana. Todo está saliendo mal…
14 ABRIL
DE CAMINO A SURLT
Salimos apresuradamente de la ciudad dejando atrás a Heffist y a Sak. Espero que nos encuentren rápido, pues este viaje está cargado de peligros y mala suerte. Aparentemente somos bastantes, pero aptos para la lucha sólo estamos el minero, JHJHKHKASDHDGAHDG (el draconut) y yo. Así que la visita inesperada de un viejo conocido, supuso un alivio para el grupo. Se trataba de Kity, un misterioso encapuchado que conocí cuando íbamos tras la peligrosa cazadora caótica. Al parecer, el chico se metió a través del portal y apareció en Puerto Soldado. ¿Qué estará
sucediendo con el entramado del tiempo? ¿Tal vez Arachne Solara ha dejado también de existir?
Pues bien, el joven kily se presentó de una manera bastante curiosa. Ni más ni menos que tiene un poder mediante el cual extiende su sentido de la voz a otras personas. Y adivinad a quien se la jugó. Fue al graciosillo de Artuk. Y precisamente por ello no tuve en los mensajes obscenos hacia mi persona. Estaba a punto de echarme a reír cuando JHJHKHKASDHDGAHDG apareció entre la espesura directo a atacar a kity. Corrí cuanto puede para desviarle de la trayectoria y por suerte conseguí apartarle un poco. Luego, intenté agarrarle de forma pacífica para que se detuviese. Le intenté explicar que era un amigo, y de pronto, JHJHKHKASDHDGAHDG, se quedó parado, inerte. Nadie podría predecir cuanto tiempo estaría en ese estado. Así que seguimos avanzando sin él en dirección Sur.
Ayer mismo, mientras avanzábamos en dirección Sur, llegamos a las ruinas costeras. Al menos, por ahora parece que el mapa es correcto. Como iba diciendo encontramos las ruinas. Se trataba de un conjunto de edificios en forma de círculo, que otrora se erguirían orgullosos en la cima del acantilado. Hoy sólo quedaban las paredes rotas de algunos de ellos. El más alto era una torre y rápidamente subí para divisar que podíamos ver desde arriba. Una vez allí a parte una vista magnífica contemplé un puente que cruzaba el río y una explanada con bosque poco denso. La idea de que el mapa fuese correcto resultaba ser un alivio. ¿Entonces a
qué viene eso de la mala suerte? Soy una experta escaladora y no sé qué pudo pasar para acabar precipitándome al vacío. Me hice bastante daño en el pecho…pero bueno…el daño podía haber sido mucho peor de lo que fue. Pero algo me dice que el aire que respiramos está maldito. Tengo la certeza de que algo no va a salir bien. Además, hay momentos en los que no recuerdo los pasos de mis rituales y eso me preocupa mucho. ¿Habrán pasado tantos años cómo dicen y la energía del Dragón se está perdiendo? Debemos seguir adelante, pero maldigo una y mil veces haber venido a esta Isla.
Las heridas de la caída todavía no estaban curadas, pero mucho peores deberían ser para hacer que no pudiese avanzar. Sin embargo, algo mucho peor me estaba pasando. ¡De pronto, las escamas de mi piel comenzaban a caerse! Eso sí es un mal augurio… La oscuridad se había cernido sobre mí y cuando comenzó a oscurecer de verdad, como siempre busqué un lugar protegido para montar la tienda. La primera guardia la montamos JHJHKHKASDHDGAHDG, que había vuelto a aparecer y yo. Todo estaba en silencio, y no paraba de dar vueltas a los malos acontecimientos. De pronto, alguien me llamó por la espalda. ¿Quién era? Cuando me giré observé a un babuino que llevaba un bastón. Perecía un chamán, y me dijo si queríamos unirnos a ellos, para aunar fuerzas en esta temible Isla. Me pareció que estaba siendo sincero y le dije que sí, pues nos vendría bien viajar con más apoyo. Maldije todo cuando escuché el gruñido de JHJHKHKASDHDGAHDG. ¡Nooo! Otra vez, no. Intenté como pude calmar los ánimos, pero la furia ya se había desatado. ¿Qué podía hacer yo? Nadie quería parar esa locura y por primera vez, yo no sabía que tenía que hacer. De todas formas, no pensé demasiado, pues varias pedradas me llevaron a la inconsciencia.
Afortunadamente, mis ojos volvieron a ver la luz de un nuevo día. Y fue una grata sorpresa, no sólo encontrar a las tropas de Surlt, sino además comandadas por el mismo Rey Yalarung. Parece un hombre fuerte y cortés. Parece que van a cazar dinosourios y no le he logrado convencer para que le acompañemos. Sin embargo, nos ha dejado un grupo de soldados para que nos acompañen hasta Surlt.
Estábamos en el templo, y Artuk explicaba al sacerdote cómo Lankor Mhy nos había salvado de una muerte segura. Entonces Yaskard comenzó a decirle que era un modesto, pues en realidad decía que Artuk era quien usando su sabiduría consiguió engañar al troll diciendo que íbamos de parte de Kall (el troll esclavo que Artuk compró en Puerto Soldado). De nuevo, todo se desvaneció y de nuevo estábamos en el campamento, a merced de la Sombra y los trolls. Entonces se apareció el avatar de Lankor Mhy, con truenos cayendo alrededor y un ser que se arrastraba por los
suelos. El gran sabio le dijo a Artuk que debía usar los conocimientos para salir de sus apuros...
Así que el acolito le obedeció y conseguimos llamar la atención de los trolls. Al principio se mostraron reticentes, pero conforme fue dándoles más datos comenzaron a confiar en nosotros. De hecho, nos contaron los planes que tenían. Al parecer querían atacar Puerto Soldado, pues por culpa de que los humanos eran muy permisivos estaba creciendo el Caos en la Isla. Aprovechamos para decirles que íbamos tras la pista de Gábriel, y se mostraron cooperativos para ayudarnos a encontrarla. También pretendían acompañarnos hasta Surlt, pero Artuk les convenció que no era buena idea porque llamaríamos mucho la atención. Así que se quedaron con nosotros para protegernos mientras dormíamos y al día siguiente comenzamos de nuevo la marcha hacia Surlt. A media jornada, Sak se dio cuenta de que quedaba un día para el Gran Día Sagrado de su Dios, y decidió adelantarse con uno de los caballos y un conjuro de celeridad que le lanzó Artuk para que llegara lo más rápido posible. Nosotros tardamos otros dos días en llegar. Una de las noches sufrimos el ataque de una manada de lobos y sufrimos la baja de uno de los niños (Jimy). La pobre Carla cree que es culpa suya, y no se da cuenta que todos tarde o temprano pereceremos…
Por fin hemos llegado a Surlt. Aunque mi estancia aquí es muy breve me siento mejor que en Puerto Soldado. Nos hospedamos en una taberna humilde llevada por Reus mechón blanco. He oído sonidos de cuernos y el posadero me ha dicho que se trataba del Rey. Así que he dejado a Artuk dándose un baño de agua caliente y he acudido a recibir a Yalaring. Había muchísima gente dándole la bienvenida y por suerte, entre el público he podido ver a Sak.
El Joven, me ha dicho que iba a participar en la gran cacería y he pensado que yo también podría apuntarme. Sería una buena oportunidad para relacionarme con las gentes de Surlt y demostrar al Rey de que podemos acompañarle en sus cacerías. Al fin y al cabo, parece que conoce bien la Isla y sería un perfecto aliado en la búsqueda de la Caótica.
Cuando me he presentado, todos se han reído de mí. No es la primera vez que me sucede, y la verdad es que no me molesta. Es normal que reaccionen de esa manera. Sin embargo el Rey se ha molestado, y me ha propuesto que si vencía a uno de los perros con las manos desnudas podría presentarme. Y así lo he hecho.
Acaba de amanecer y acabo de enterarme de que sólo se puede luchar con jabalina y cerbatana. No son mis estilos de combate idóneos, pero puedo intentarlo. Yo y mi mente somos uno, y si consigo sintonizar con mi energía, seré capaz de hacerlo.
Salí del agua considerablemente fatigada y me lancé un hechizo para estar fresca en las siguientes pruebas. La espesura de los arbustos no me dejaba ver las estacas, y seguí buscándolas. Algunos de mis adversarios me adelantaron, pero yo debía concentrarme para encontrar la estaca y centrar mi mente sólo en ello. Al final, cuando quité todos los demonios de mi cabeza, conseguí encontrarla. En ese momento, iba tercera. Escuché varias veces a los perros, lo que significaba que todavía podía alcanzarles. Así que trepé por una zona más escarpada para ganar tiempo y cuando llegué arriba enseguida los perros me ladraron. Tenían unos sentidos muy agudizados, así que debería ser como el viento para que no ladraran. Por ello, pensé que mi cuerpo era una pluma mecida por el viento, y de esta forma conseguí cruzar. Adelanté a un votanki en esta prueba, al que ahora conozco como Guirinsham. Desde lo alto de la cumbre podía divisar a otro votanki que me retaba con la mirada. Así que descendí con gran destreza la colina escarpada, cuyo último tramo llevaba más pendiente, y de un salto me puse en la misma posición que el votanki.
Los dos corrimos a gran velocidad por la llanura, pero mi velocidad era mayor. Por eso, fui yo la primera en lanzar una jabalina. Jamás había lanzado una en mi vida, pero no debería ser muy complicado. Así que acertar, acerté en la diana, pero debía dar en el centro si quería ganar ¡Extraño juego el de los votankis! Cuando arrojé mi quinta lanza, no había conseguido impactar en el blanco, y mi rival, que había conseguido más puntuación que yo, se iba a proclamar campeón. Debía mejorar mis capacidades, porque perder ese espíritu, no era una opción. De pronto, Guirimsham, que ya no podía hacer nada para ganar, se acercó a mí y susurró unas palabras a su jabalina antes de cedérmela para que pudiera lanzar una sexta. Así que la arrojé con todas mis fuerzas. Sí, de esta manera me coronaron vencedora, porque al final sumaba más puntos que el otro votanki, el que por supuesto acabó terriblemente enfadado. El maestro cazador también parecía indignado, como así me lo hizo
saber cuándo me dijo “Nunca conseguirás cazar una gran presa”. Sin embargo, el rey y el chamán no parecían disgustados. Así que el desenlace, fue muy distinto a cómo se preveía en un principio. El cosmos es muy caprichoso a veces…
Después de entregarle el espíritu a Irkani, fui a darle las gracias a Guirinsham, gracias a Artuk que hacía de traductor. El votanki comenzó a hacer gestos extraños, y que yo entendí como una muestra de amistad. Artuk me dijo que Guirinsham le había dicho que yo le recordaba a su hermana guerrera y que me consideraba como la tercera hermana. Ahora ya formaba parte del clan Trucha Arco Iris. Hoy la energía fluye vigorosa en mí, pues de nuevo se presenta una gran oportunidad para estrechar lazos con los votankis y de esta manera intentar dar con el paradero de la caótica. También intentaré mejorar algo mis técnicas para la gran cacería, otra buena oportunidad para conocer la morfología de la Isla, y viajando con un numeroso grupo de gente.
La celebración se ha llevado a cabo en la taberna del Cerdo Degollado. He aprovechado para preguntar por los precios, y son más caros que los del Oso Rojo. No entiendo nada a los votankis, así que me he paseado por la taberna. Me ha llamado la atención, que en la parte superior, había una habitación con las runas del viento, la lluvia y el agua en su puerta. ¿Tal vez de un orlanthi?
Después de sufrir una reprimenda por parte del vigilante, he regresado abajo y escuché una conversación de unos soldados de Puerto Soldado acerca de Toranth Manover. Decían que era un exiliado al que no querían los unos ni los otros. Que no sabían si era zaringa o votanki. Pero que estaba claro que gracias a Maugre y a los trilanceros todo marchaba como la seda en puerto soldado. Incluso el borracho dijo que todos los forasteros debían arrodillarse frente a Yelm.
Más tarde llegaron Artuk y Sak. Venían a decirme que íbamos a reunirnos con el rey para comer. Así que marchamos hacia su castillo. Por el camino, les conté algunas cosas que me llamaron la atención, y ellos hicieron lo mismo. Habian conocido a Eucleya la Tempestuosa, la hija ilegítima de Skilfil Peroforahogares, más conocido como el Rey de Nidik. Al parecer la joven quería convertirse en sacerdotisa de Orlanth y debido
a ello no tenía buenas relaciones con su familia, pese a que su padre parece seguir queriéndola. ¿Será suya entonces la habitación de la posada?
También me han comentado habladurías sobre Regus. Dicen que en su sótano hace frio y huele mal, que tal vez guarde cadáveres…habrá que vigilarlo por si acaso.
Finalmente hemos llegado a la gran muralla y unos soldados nos han recibido. Mientras esperábamos, Artuk y Sak se han puesto a hablar con dos de los soldados acerca de si podrían entrenar a Sak en el manejo de las espadas, y yo he preguntado por la antigüedad de las murallas y de las tumbas de sus constructores. Un soldado muy amable me ha dicho que si lo pregunto al rey puede que me dejara entrar en el cementerio interior para admirar sus tumbas.
Han pasado dos días desde que Artuk y Totakeke marcharon hacia Ockless. Los que nos hemos quedado fuera de la ciudadela exploramos la zona sur cerca del rio. Esa noche acampamos por allí, en un lugar bastante refugiado de posibles ataques. Debemos extremar las precauciones si los trolls están de por medio…
Cuando regresábamos hacia el camino para reunirnos con nuestros compañeros, en caso de haber salido de la ciudad, nos encontramos un cráneo clavado en un palo de madera. No creí que pudiese ser nada malo, pensé que esos asquerosos trolls se habían divertido empalando a alguien o a saber qué. Odiaba esa ciudad que se levantaba con murallas majestuosas, cuando en realidad sólo era un nido de ratas. Como iba diciendo, cuando me di cuenta que las plantas estaban muertas alrededor del cráneo, ya era demasiado tarde para prepararse contra el espectro. Así que salí corriendo para evitar sus ataques. La amenaza no era significativa, pero las palabras del espectro sí, pues no paraba de repetir “ellos me robaron las tierras, ellos, ellos…”. Por un momento pensé que se refería a los habitantes de Ockless. Así que corrí hacia la estaca de madera para coger el palo donde estaba clavado el que antaño fuese un votanki, no sin recibir algunos golpes por su parte. Seguramente
Artuk podría ver en visiones la historia de ese espectro y quien le robó las tierras.
Nos dirigimos a las lindes del bosque cuando ya era de noche. Numerosos trolls custodiaban las murallas. De pronto, vimos como Totakeke se dirigía con un hombre a una casa fuera de la ciudad, pero Artuk no iba con ellos. Debíamos seguir vigilando desde la distancia. Me quedé con las lentes viendo el movimiento de la torre. Vi salir al hombre alto. Inmediatamente apareció el hombre levitando sobre su escudo. Parecía que buscaba algo en la torre, y por sus movimientos parecía que no encontró lo que buscaba. Luego se marchó. Con la ayuda de la mostali llegamos a la torre pero no vimos nada. Allí me encontré con un pato advirtiéndonos de que era peligroso estar en la torre. Al parecer el también pretendía entrar en la torre…hemos vuelto a las lindes del bosque…
UN MALENTENDIDO CON LOS SOLDADOS DE OCKLES
Después de terminar con la amenaza que suponen los dientes de sable, y perdonar la vida al último que queda, seguimos nuestro camino hacia Surlt.
Soy Heffist, y estoy escrrribiendo en este diarrrio porrrque la aldrrryami se ha hecho daño en las manos durante la pelea con el grrran dientes de sable. Seguimos camino a Surrrlt viajando de día y parrando en lugarres seguros al anochecerrr. Estoy deseando llegarr a Puerrto Soldado parra poderr jugarr una parrtida como la gran máquina manda. Porr si no fuera poco, viaja con nosotrros ese estúpido troll que no parra de prreparrar asquerrosa comida que sabe a culo de trrollkin. No le soporrto.
Anoche tuvimos un incidente. Descansábamos en un abrrigo a los pies de una colina, cuando esos soldados de Ockless comenzarron a
atacarrnos. Luchamos durante un tiempo hasta que se dieron cuenta que estaba con nosotrrros el mercaderr. Entonces nos dijerrron que todo había sido una confusión. Nos fuimos de allí en cuanto nos fue posible.
Nos hemos topado en el camino con un hombrrrre herrido. Era un mensajerrro de Puerrto Soldado. Al saberrr que no érramos gentes de Ockless, nos ha confiado su mensaje para que lo llevemos a Puerrto Soldado. Quierren atacar esta ciudad porque es la que abastece de mercancía a Ockless. Si cae Puerto Soldado, cae Ockless. ¿Quién querrá acabar con Ockless? Yalaring, Skifill Perforahogares, algunos trolls rebeldes que quieren recuperar lo que un día fue suyo comandados por Marrusa (y digo esto último porque el troll esclavo de Artuk nos dijo que querrian atacar Puerto Soldado, y ese estaba compinchado con esa mujerrr). ¿Quién es ella y porrr que está metida en todos los asuntos?
EL MENSAJERO
Tras curar al mensajero, pretendía hablar con él para sacarle más información sobre los que nos acababa de decir. Sin embargo, tanto el troll como Shak sacaron las armas para sacarle la información de otro modo. Cuando el mensajero se percató y huyó despavorido, corrí tras él para protegerle, pero la lanza del troll fue más rápida que mis piernas y se clavó en la espalda del desgraciado. Rápidamente, intenté atenderle, pero salía demasiada sangre de aquella herida. No sabía por dónde debía taponar. De pronto, la mano del troll agarró el cuerpo y se lo introdujo en la boca, despedazándolo de una forma terrible y dejándome incapaz de hacer nada por su vida. Me he dado cuenta que Shak actúa de un modo extraño últimamente, no es propio de él atacar así a la gente. Temo que la muerte de Artuk y la escena que ha presenciado puedan afectar a su equilibrio energético. Si conseguimos resucitar a Artuk le comentaré el estado de Shak, por si debemos volver a dejarlo con las chalanitas para que se encarguen de limpiar su mente de tanta tragedia que le oprime.
Tras la muerte del mensajero, el troll ha seguido haciendo de las suyas con los propios guardias de Gondo, y la suerte se ha vuelto de nuestro lado, pues los guardias han ahuyentado a la bestia con su magia. Tras estos incidentes todo ha transcurrido con normalidad. Sin embargo, esta mañana, cuando hemos emprendido viaje hacia Surlt, Heffist nos ha contado que observó algo extraño en el comportamiento de los guardias de Gondo. Parece que se relamían observado la grotesca escena que había provocado el troll. Eso hizo que nos mantuviéramos expectantes hasta que entramos en Surlt.
Esta ciudad me produce tranquilidad, y pese a que me hubiese gustado ir a saludar a mi gente de la Trucha Arco Iris, me debo a mis obligaciones
y tuve que regatear con Tarn El Tigre para que nos llevara por un precio no tan abusivo hasta Puerto Soldado por río. Después hable con Gondo sobre sus guardias y me dijo que era normal, pues desde pequeños estaban acostumbrados a observar estas escenas. Luego me habló de la suma de dinero que nos pagaría si completábamos con éxito la misión. Conseguir la piedra verde que habían robado los slarges de un cargamento enano. Lo más sorprendente fue cuando mencionó que en su último viaje había llevado en su barco a una pelirroja. Sin duda debía ser Gábriel La Cazadora. No quise llamar mi atención sobre esa mujer, sin embargo sugerí a Shak que podía tratarse de la que le robó el ciervo. Tarn nos pidió mucho dinero por hablar de ella y preferimos no llamar la atención.
Algo también nos sorprendió de camino, casi en la desembocadura del rio. Tras una espesa niebla se levantaban zombis que intentaban escapar de unas enormes raíces. Según los marineros se trataba de algo caótico que no hacía mucho que había aparecido. Me pregunté si aquello tendría algo que ver con la llegada de Gábriel a la Isla…
Por fin hemos llegado a Puerto Soldado. Rápidamente hemos ido al templo de los Portadores de la Luz y una dama blanca nos ha tranquilizado sobre la resurrección de Artuk. Tras varias horas de ritual, he comenzado a sentir vida en él. De nuevo, siento fluir la energía por su cuerpo.
EL LIBRO DE REGUS Y LA CAZA DE SLARGES, PIEDRA VERDE Y OTRAS COSAS.
Antes de partir de Puerto Soldado camino a la tierra de los slarges, Maugre nos hizo llamar. Nos comentó que cuando él llegó a la Isla, un amigo suyo llamado Acrómetes desapareció en extrañas circunstancias cuando estaban en Ockless, y como vio en nosotros a unas buenas personas, había decidido prestarnos la ayuda de uno de sus hombres. Se trataba de un fornido yelmalita, cuyo nombre todavía es una intriga para nosotros.
Parecía que ya estaba todo dispuesto para salir, sin embargo Artuk recordó que tenía cierto libro en su poder, y que no había tenido ocasión de leer su contenido. Se trataba del LIBRO DE REGUS CABELLOS BLANCOS, y decía:
Habla sobre enclaves de slarges no explorados del Este, dónde se reúnen seres caóticos y se hacen rituales. Al principio trata la historia antigua de la Isla, narrando cosas que no tienen mucho sentido. En ese instante, sucede algo raro. Artuk tiene un recuerdo de él mismo buscando en un libro la ubicación de la Isla. El que escribió el libro, veía a Yelmalio como el que trajo el mal, pues en ese momento gobernaban los broos. Entonces Zar se enfrentó con un demonio, hijo del diablo, llamado “……….sa” (está
borroso) para que ocultara para siempre los secretos de Puerto Calavera y luego, mató al héroe de los broos, el cual mediante la hechicería tenía sometidos a los slarges.
Posteriormente, levantaron Ockless con gigantes esclavizados.
Un héroe de los cazadores expulsó de la ciudadela a los forasteros, e implantó la dinastía de los Gardaringer, y al mismo tiempo los gigantes destruyeron Nidik, y Puerto Soldado fue tomada por un mercader.
Luego, los broos se unificaron y expulsaron de la Isla a los humanos, y asaltaron Ockless, y luego Surlt.
Posteriormente, llegó Aigonus y reconstruyó Nidik. Construyó el templo de los portadores de la Luz de Puerto Soldado (lo cual hace ver que no era yelmalita). Buscó el árbol del Viento para reconstruir Ockless. Se habla que un joven cazador “c…..varen” fue poseído por un demonio y se convirtió en un poderoso hechicero (suponemos que era Halcyon Var Encor, coincide con la frase tachada), el cual fue llamado el Liberador. De esto, hace 100 años. En una época muy reciente (hace 30años) hay algo muy interesante. Se habla sobre la desaparición del hijo del Rey de Ockless (el supuesto heredero).
Toda esta es la información sacada del libro.
Por fin emprendimos la marcha.
El primer día fue tranquilo. El segundo, vimos el rastro del carro y lo seguimos. Al poco dimos con el grupo de slarges y llevaban a varios hombres que tiraban del carro y no estaban vivos. Nuestro grupo discutía por como atacar al enemigo, y por fin ganó la propuesta de teletransportarnos todos a su lugar, apareciendo por sorpresa. Y la sorpresa nos la dieron ellos, pues contaban con un espíritu hellion que fue dejando inconscientes, primero a la amazona, luego a Heffist. Artuk, Totakeke y yo corrimos a escondernos con el cuerpo del enano en brazos, pero de nuevo el hellion atacó a Artuk y a Totakeke. Entonces la iniciada de Ernalda nos salvó la vida sacando a un espíritu de la tierra para hacerles frente. Yo aproveché para lanzar una baya explosiva sobre el Slarge que iba cargado de botellitas. Finalmente, salí tras el slarge que llevaba signos de exclamación, pero tras derribarlo, el gnomo me aplastó junto a él dejándome inconsciente. Desperté en la carreta cargada de piedra verde mientras el gnomo nos llevaba de vuelta a Puerto Soldado para cobrar la recompensa.
Fuimos directos a la taberna número uno, y en ese instante sonó una enorme explosión. Había explotado la casa de Zandrak Vor Helian, el alquimista. De allí salían halos mágicos. La gente decía que era un caradura que iba con prostitutas. Y que se veía a toda clase de gente
acudir a su casa. Que de allí salía un olor asqueroso. De pronto, todas las llamas mágicas desaparecieron.
Yo corrí hacia la torre de Maugre, no fuera que alguien quisiera aprovechar la distracción para atacarle.
DEFENDIENDO LA CARRETA DE LOS PIRATAS
Artuk se encargó de vender lo necesario para pagar los impuestos y el 5% del botín de los slarges a Maugre. Nada más acabar estos trámites, fuimos a buscar un mensajero para enviar la misiva a Nidik. Artuk oyó que Valander, aquel noble del problema de lindes con Varikas Bianca, podía mandar el mensaje. Yo, por otro lado, busqué otras fuentes. Pues aquel tipo no me gustó demasiado la última vez que le vi. Encontré algunas personas que podían hacerlo, pero ese noble contaba con mensajeros a caballo, y parecía la forma más segura de hacerlo. Así que me fui hacia su casa, donde ya estaban Artuk y Totakeke. No me sorprendió que ese hombre pusiera trabas, pues quería saber qué contenía el mensaje y a quién iba dirigido. Como no estábamos dispuestos a compartir toda la información él, decidimos enviar el mensaje nosotros mismos. Además, se me ocurrió enviar un mensaje trampa con algún otro mensajero. De esta forma, sabríamos si alguien estaba tras nuestros pasos. También Artuk vio algo sorprendente en casa de Valander. Vio un papel con un mapa y un sello de Maugre. Sin duda, debía ser el contrato de las lindes. Íbamos hacia la torre, cuando se me ocurrió entrar en la posada para preguntar al posadero por algún mensajero de confianza, cuando vimos a (Mercader Ladrón de Ockles) sentado en una mesa, y parecía que nos había estado buscando. Durante la primera conversación, no sabía de quién se trataba, pues le vi muy de lejos con la rata de Artuk cuando estuvimos en Ockles. Ese rufián quería el cargamento de piedra verde, y nos ofrecía menos dinero que GondoHolst. Le dijimos que nos lo íbamos a pensar, y subimos a la habitación de la posada a discutirlo. Realmente, lo que queríamos abordar era el tema de cómo decirle a ese tipo que devolviera a la rata. Cuando se lo dijimos, el hombre salió pitando de la posada. Decía que no sabía de qué rata hablábamos. Yo le intenté advertir de que posiblemente me había confundido de persona, y que entonces aquel tipo era un ladrón, que salió de dentro de su torre. Pero él no dejó que hablase y se marchó muy enfadado. Entonces se nos ocurrió que si llevaba la rata en su zurrón, los trilanceros lo habrían anotado al entrar en Puerto Soldado. Así que nos fuimos a la torre de Maugre a pedirle ese favor, y ya de paso, también un informe de los límites de lindes. Esto último tardaría más días, pero lo otro lo solucionamos al instante. Ese hombre no llevaba la rata.
Después de todo, nos acercamos a casa de Varikas Bianka y nos sorprendió la presencia de una mujer en la casa. Al parecer, había
heredado la casa. ¿Qué habría sido de Varikas? Ahora eso me importaba poco, si ese hombre había desaparecido ya no era cosa nuestra su problemas con el mercader. Sin embargo, Artuk pierde el tiempo y el dinero, ayudando a personas que ni nos van ni nos vienen. Simples espectadores del tiempo, que no nos aportan nada.
Tras todo esto, acompañamos a Artuk a su templo, y Totakeke y yo nos quedamos a trabajar de vigilantes para Maugre. Haciendo la ronda, nos encontramos a un hombre extraño con un saco entrando en una casa. Era muy sospechoso, y encima salió con la bolsa vacía. Siguiéndole, fuimos a parar a la posada número 1, y allí en su tejado vimos una sombra negra. Totakeke y yo temimos lo peor. Estaban intentando robar la carreta. Afortunadamente, el líder del clan Trucha Arco Iris y yo les hicimos frente, pese a ser 2 contra 8. Bueno, 9 si Jim el pato cuenta…pues cuando todo se complicó puso los pies en polvorosa. Pudimos averiguar que se trataban de piratas. Posiblemente, del Flecha de Corda.
Por fin hemos podido resucitar a Artuk. Me alegré de oírle toser cuando despertó, pero pensé que esa felicidad podía desvanecerse en cualquier momento, pues esa isla estaba llena de contradicciones y traidores. Lo único que me contentaba es que el Botero de la Penumbra le acompañaría en su último viaje.
Después de estas conclusiones, le conté a Artuk todo cuanto había sucedido, y él, lo primero que hizo fue hablar con la hermana chalanita para preguntar por el tipo de sustancia que le había matado. La hermana dijo que volviésemos en otro momento, cuando hubiese recopilado la información.
Lo primero que hicimos fue ir a hablar con el capitán del Fuego Espiritual para conseguir información de la Caótica, pero una vez en el puerto, nos dijeron que los piratas habían bajado a tierra y preferimos buscarles por la ciudad. Y allí que fuimos. Todo parecía seguir igual, sin embargo, se notaba más movimiento de soldados. Cuando nos recibieron en la puerta, el jefe de los mercenarios, nos dijo que el Plutarca Maugre quería vernos. A mí me pareció un poco extraño que quisiera vernos así de pronto, pero fuimos a la torre. En el piso inferior estaban las habitaciones de los trilanceros. Por fin bajó el imponente Maugre con tres trilanceros y muy amablemente nos llevó a una sala donde comimos abundantemente. Básicamente, quería saber si sabíamos alguna
manera de abandonar la isla, pero hablando con él, comprendió que no. Según él, sólo se podía abandonar la Isla mediante la magia. Nos ofreció también ser sus guardias, y por ello nos pagaría 5MP. Y nos pagaría 5MP por cada cabeza de slarge que le lleváramos y 15MP si era el gran slarge. Y quedarnos con todas las posesiones de los slarges. Lo único sería pagar el 5% como todos los mercaderes. Aceptamos ambas misiones.
Durante la charla, de vez en cuando llegaba un olor extraño del piso superior ¿sería el hechicero? A saber que se estaba cociendo allí dentro. Sin duda, el plutarca sabía protegerse, y si no sólo había que ver la gran balista de encima de la torre. Seguro que con ella se podía derribar fácilmente a un grifo…
Bueno, tras salir de la torre nos fuimos a la taberna número 1. Supusimos que allí encontraríamos a los piratas, y así fue. Pero antes hablamos con Bradskull sobre los términos del contrato con Gondoholst. Finalmente, se quedaría en 15MP por cada kg de piedra verde recuperado. Nos llamó la atención también el comentario que nos hizo el posadero, pues habían visto a la pelirroja de Babeester Gor que fue enterrada cuando ellos llegaron a la Isla arrastrándose por el suelo como un no muerto. Al instante, estábamos hablando con los piratas que estaban borrachos en una mesa de la taberna. Artuk aún les hizo beber más y tuvimos la evidencia de que habían visto a Gábriel, pero eso no era suficiente, y fuimos a pagar al capitán para que nos hablara de ella.
Pero de camino, nos encontramos con unos draconuts que la buscaban. La última vez, había sido vista en las colinas Zutchko, y se dirigía al oeste, hacia el rio Ergayol. E iba en busca de la Espada de los Vientos. Los draconuts nos prometieron 500MP por decirles la localización dónde se escondía, 50MP por cada pista buena, y 10 cofres de 500MP cada uno, si se la entregábamos con vida.
Finalmente, llegamos hasta el capitán. Nos contó que unos tal Ladian y Galadan llegaron en otros barco pirata y les abordaron. Esa mujer tenía a sus pies a todo el navío .Cuando ellos les abordaron, la mujer pareció tener un efecto similar en los hombres de este barco. Todos querían fornicar con la pelirroja. De vez en cuando, el capitán parecía tener un lapsus y no recordaba con claridad.
Habló sobre que la mujer había visto cual era el lugar secreto donde los piratas guardaban sus mercancías, que los votankis pensaban que era Granni y que la habían visto donde ellos no se atrevían a ir. Donde las aguas burbujeaban por la diosa Triolina (aquí, el capitán se mordió la lengua, como si estuviese hablando más de la cuenta). Mencionó que la mujer se acostó con toda la tripulación, y mientras, Eladar miraba hacia
otro lado con asco. Parecía que seguía el culto de Las Siete*. Después de esto, Artuk hizo una reconstrucción sobre la cama, y vio lo siguiente:
- Gábriel, con la pierna como podrida y escamosa estaba con varios hombres acostada.
- Estaba erguida, y tenía unos tentáculos saliendo de los hombros, con cabeza de hombres.
- En la última visión, se veía su cara, y se parecía mucho a ella, aunque tampoco lo parecía. Tenía el pelo moreno. Algo contradictorio.
Tras las desconcertantes visiones, y antes de volver a tierra, el capitán nos propuso que atacáramos junto a él y otros apoyos a Puerto Soldado y que nos quedáramos con todo el poder y la ciudad. Que estaban hartos de ese explotador de Maugre.
Ahí se quedó la cosa, pues debíamos meditarlo.
Por ahora, iríamos en busca de los slarges y de camino investigaríamos el rastro de la caótica. Antes de partir hemos vuelto al templo de Chalana Arroy, y parece que el veneno de Artuk, era de origen uz ¿Cuándo habría sido envenenado?
Afortunadamente, partimos en esta misión con el apoyo de unas iniciadas de Ernalda y otra de Babeester Gor.

Un pacto con Arskuss Gree. Tras la LLama...
Seguíamos luchando con las momias de Arskus Gree y con él mismo. Yo continuaba haciendo presa al comerciante cuando me dí cuenta que Serbath venía corriendo a cargarme. Reaccioné a tiempo, empujando a Arskus contra ese ser, y haciendo que los dos cayeran al suelo. Pero todavía no era suficiente. Afortunadamente, Artuk ha entrenado mucho estas últimas semanas y ha conseguido quitar la protección mágica del
hechicero, y también hacer huir de miedo al siervo. En ese instante yo estaba agarrándole el brazo, y al quitarle la protección se lo rompí dejándole incosnciente.
Cuando parecía que todo iba empezando a arreglarse, acudieron los trolls, y más tarde su lider, que a punto estuvieron de hacer que me descubriera la capucha. Por suerte o por desgracia, apareció Cyriel, quién aprovechando la situación afirmó que era un testigo de lo sucedido. En privado hablamos él, Arskus y yo llegando a un acuerdo. Cyriel diria que nuestro grupo fue atacado por las momias y nos defendimos. Sin embargo, Arskus tampoco sería culpable, puesto que diría que también fue atacado por las momias y que parecía desconocer que tuviesen espíritus dentro. A cambio de esta falsa confesión, Cyriel se quedaría con algunas cosas de la torre, y nosotros recuperaríamos nuestros objetos mágicos: varios anillos y colgantes, el mapa, e incluso la jaula dónde estaba metida Kark (había llegado entonces desde fuera de la Isla...). Luego el que más perdió fue sin duda Arskus Gree.
Después del pacto, nos adentramos más hacia Ockless, dónde debíamos firmar todas las partes. Se me ocurrió firmar con el símbolo de la diosa lunar para ver el efecto en los presentes. Inmediatamente me estaban contando toda la historia de Las Siete, y me enseñaron una constelación en el cielo. Mañana mismo proponían mi iniciación en el culto. Así, yo podría espiar de cerca a los que consideraba mis enemigos.
Tras zanjar ese tema volvimos a la torre a por todos nuestros enseres. Mantuvimos una interesante conversación con Arskus, sobre qué era la Llama. Mencionó que creía que era un antiguo espíritu mostali. Y no sabía por qué su nombre aparecía en esa lista.
Al despedir a Cyriel, me dí cuenta que sobresalía una especie de pergamino de su brazo. Por no decir que rápidamente ocultó una especie de objeto redondo en su cinto. ¿Qué sería eso que escondía?
Luego, Sylvanti y yo tuvimos una conversación en privado. Miramos el papel que Totakeke había robado. Era un ritual de invocación de un espíritu llamado Firshala, que estaba escrito en aldryami. Esto cambiaba las cosas. Debíamos salir cuanto antes hacia Nidik para obtener infomación sobre la Llama. Debíamos buscar a Buscavetas, Errap Barbacón, o incluso hablar con ese elfo cuyo nombre no recuerdo.
También me dijo que había robado una piedra solar. Un objeto que guarda la luz del Sol y por cuando se desee se enciende como una lámpara. Era muy valioso.
Desde que llegamos a la Isla siempre he tenido la sensación de que estábamos predestinados a tener mala fortuna, y no dudo de que sigamos teniéndola, pero hoy por un instante hemos abandonado ese sendero de desafortunados desencuentros. ¡Estamos delante de la casa de un alquimista esperando a que Totakeke aparezca en forma de ondina! De esa manera, podremos hacer una copia errónea de las traducciones y nunca pensaran que en nuestras manos están las buenas.
Ya puedo divisar como Totakeke avanza por la esquina a toda velocidad en dirección a la casa. Se ha colado en un segundo por debajo de la ranura de la puerta. Esperemos que nadie le descubra…
¡Oh! Totakeke ha salido de la casa y ha llamado a la puerta. Sin duda, esa es la señal para que entretengamos al alquimista mientras él coge los papeles. Pero ¿qué le digo yo ahora a ese hombre? ¿Y dónde está el pato? ¡Uyyy, un hombre borracho!...
Cuando el alquimista abrió la puerta, ahí estaba yo delante sujetando al borracho y pidiéndole ayuda para encontrar la casa de ese hombre embriagado. Intenté entretenerle lo máximo que pude, pero estaba muy impaciente por volver a sus labores y tuve que dejarle ir. Afortunadamente, fue suficiente para que el votanki los cogiera. ¿Y cómo me enteré yo de que fue suficiente? Pues porque mientras acompañaba al borracho siguiendo mi coartada, comencé a escuchar toda una serie de improperios hacia mi ser. En un segundo, tenía al alquimista dando voces y acusándome de robo. No se cómo, el hombre de la casa y el borracho comenzaron a pelear, y por supuesto, enseguida aparecieron los trilanceros para poner orden. Evidentemente, yo enseñé todas mis pertenencias de buena gana, y lógicamente, era imposible que me detuvieran. Proseguí mi marcha indemne, pero me dieron un ultimátum acerca de mi presencia en todos los problemas que acontecían últimamente.
Tras un paseo regresé a casa de Perseo, y no sólo encontré a mis compañeros alterados, sino también a un mostali de plata que venía a prevenirnos de una amenaza. Kark se había cansado de nosotros y venía a matarnos.
Mi plan sobre darles el cambiazo comenzaba a hacer aguas, pero aun así intenté llevarlo a cabo. Ese mostali de nombre Avalon hizo una falsa traducción. En ese momento apareció Mancher Boldbuster para advertirnos de que Gladstone, el hechicero de Maugre, estaba invocando demonios, al parecer contra nosotros. Le di la copia a Mancher y le di instrucciones de qué debía hacer con ella.
Sin mirar atrás salimos de Puerto Soldado con la carreta de Avalon. Creo que será la última vez que vuelva a pisar esa ciudad si no se produce un cambio en el Gobierno.
Al soldado de las lindes le dije que íbamos en dirección a Ockless; en realidad vamos al Este.
Ahora mismo retomo el diario porque estoy bastante enfadada con el pato. Hemos discutido porque al pasar por la costa recordó que posiblemente había visto a Gábriel, y no lo dijo hasta pasado un rato. Tendré que vigilarle de cerca, y espero que Silvanty no esté en lo cierto al acusarle de traidor.
Durante la escapada, Totakeke me contó que un espíritu le había dicho que debíamos coger la piedra de los huesos porque tenía un gran poder y no debíamos dejar que cayera en malas manos. Por eso nos dirigimos allí.
Estamos en la costa esperando a que el pato disfrace a Totakeke de pescador. En breve irá hasta el navío a por información.
Hago guardia junto a Shak y Granota, mientras los demás recuperan fuerzas. Con
mis lentes diviso los barcos fondeados. El navio elfico, guiado por sus ondinas se dirige al oeste. En la Reina de Trahan, el mostali, comercian con humanos. En el de Tarn el Tigre, los piratas trabajan en cubierta. La Flecha de Corda hace preparartivos para partir. Y en el Viento del Norte también trabajan sus tripulantes.
Cuando comienza a oscurecer hacemos un cambio de guardia y descanso. Cuando despierto después de 5 hrs, Totakeke todavía continua durmiendo, pues no ha podidoinvocar a la ondina quedándose sin energías mágicas. Incluso tampoco ha sido capaz de sintonizar con el espíritu de la naturaleza de Sylvanthi cuyo fetiche lleva tatuado en las piernas.
Ahora parece que ha descansado mejor, y se marcha como teníamos previsto, protegido por su ondina.
El resto emprendemos rumbo a la desembocadura del rio Ergayol. De pronto el halcón divisa que viene la caravana de Gondo con dos carros y decidimos hacerle una emboscada en el puente del rio. Cuando llegan
Shak, atrae a los bisontes hasta un punto del puente, el durulz dispara al poni y comienza la pelea. Sylvanthi atraviesa la cabeza de uno de los soldados con la jabalina. Al ponerse la cosa fea, Gondo ordena que saquen 2 jackosos del carromato. Evidentemente, eran caóticos y venían a por nosotros....
Luchamos frenéticamente contra Gondo y sus ilusiones de jack-oso y demonio. Cuando parecía que la cosa se ponía de nuestro lado, Gondo hace una especie de intervención y aparece un demonio echando ácido. Cuando voy a atacar a Gondo para que no pueda pedirle nada, el demonio me lanza ácido y caigo inconsciente. Al parecer Gondo no nos quería muertos, pues al abrir los ojos estábamos todos en unas carretas, junto a un niño, un enano y un trollkin, vigilados en todo momento por los jack-oso. Guiándome por mi orientación diría que habíamos viajado 20 dias. Cuando volví a despertar, estábamos atados a un altar de piedra. Nos rodeaban 4 monolitos dispuestos en forma de cuadrado a nuestro alrededor. Arriba tenian unas piedras verdes que desprendían un fulgor. La vegetación del suelo parecía pelo de un oso. Habian esporas rojizas. Gondo hacia un ritual, nos dibujaba runas en el cuerpo y recogía la sangre en un cuenco. Cuando la echaba en el suelo, las protuberancias rojizas se hacian más grandes. De pronto, Avalon se transformó en murciélago y escapó. Para entonces Tak ya me habia liberado de las cerraduras de mis manos. Estaba esperando a que Gondo se acercase para retorcerle el pescuezo, cuando de pronto aparecí en el bosque, junto a todos los demás. Avalon nos había salvado. Comencé a aplicarle primeros auxilios a sylvanthi, que todavia estaba inconsciente y apareció un dientes de sable para ayudarnos. Nos condujo a una charca y al tiempo apareció cara azul, que nos hizo algo a shak y a mi, y comenzamos a atacarle. Teniamos dentro la magia negra de marussa por haber hecho un pacto de sangre. Finalmente vomitamos una especie de babosas grandes. Ahora sylvanthi desconfía de nosotros por no habérselo contado. Tras liberarnos, cara azul nos ha hablado sobre el tiempo en glorantha. Leer conversacion con cara azul.
Mientras tanto, Totakeke malherido ha sido rescatdo porunos cazadores. Cuando se recuperó, marchó a pto soldado, hablo con el draconut de la entrada y luego fue a la posada e hizo tratos con los piratas. De pronto, en la festividad de yelm comenzaron a caer rayos solares del cielo y uno acabó con su vida.
Conversación con Totakeke, lucha no muertos, penetración Ruina Calavera y Puerta de Cobre.
Resumen: Seguimos a Dorna Raiz Larga hasta la ruina Calavera, tenemos conversación con Totakeke (subida a box). Luchamos contra no muertos. Penetramos en el cráneo, nos perdemos y llegamos a una puerta de cobre, custodiada por no muerto.
Vimos como Dorna Raíz Larga desaparecía a los pies de la gran mole de piedra, en cuyo perfil, se dibujaba claramente un cráneo humano.
El frío comenzaba a palparse cada vez más, y a nuestros pies, todo lo que antaño fue vida se deshacía dejando todo el suelo lleno de una especie de ceniza que se arremolinaba a nuestro paso.
Según avanzábamos por la depresión, varios espíritus salieron a nuestro encuentro, y Shark salió despavorido al verlos. Ya me había encontrado con esta situación anteriormente con Shak (debe ser por el parecido de nombres, XDD), y fui a por él para intentar calmarle. Reaccionó bastante bien, y por ahora creo que podrá seguir siendo de ayuda.
De repente paso algo totalmente inesperado. Un espíritu nos daba la bienvenida a la casa de la Muerte Piadosa. ¡Sí! Sin duda eran ellos. ¿Cómo podía ser? Eran los maridos que elegimos como ofrenda para las hermanas de la piedad en la búsqueda heroica…Evidentemente como dijo Cara Azul, todo es un ciclo, pero hay muchas cosas que no entiendo. Todavía no estamos cualificados para entender lo que el destino nos depara. Ojalá estuviese aquí el sabio para hacernos entender.
Como si nos leyera la mente, otro espíritu se hizo visible. ¡Era Totakeke! Y venía a advertirnos de que no había podido completar su misión, y que debíamos hacerlo por él. Ahora que vagaba entre los muertos es cuando había entendido porqué nos llamaban “los que habíamos traído a la Muerte”. Al parecer, como ya pensamos en su día, Eladar y Gábriel se habían cruzado en nuestra búsqueda. Ellos realizaban la del Purificado, pero pronto Eladar se dio cuenta de que había sido un engaño del semidios que habitaba dentro de la vingana, Osboropo. Como era el mismo mito que el nuestro, se cruzaron, y Eladar comenzó a ponernos la zancadilla para que el mito les expulsara. Osboropo rasgó el velo de los planos, y Kark estaba presente cuando Gorgorma le enseña el secreto de la muerte a Lankor Mhy, y lo robó. Por eso el hechicero hablaba con Gondo sobre la inmortalidad…
Así que nuestro cometido era matar a Rashonara y a Gábriel.
Tras estas palabras el espíritu del votanki comenzó a agitarse. Nos advirtió que su señor le obligaría a hacernos daño, que nos diésemos prisa, que la oscuridad ya llegaba. Del suelo empezaron a salir criaturas, zombis, esqueletos, ghouls… y todos venían a por nosotros. Nos defendimos como pudimos mientras corríamos a los pies de la calavera. Zebra se adelantó, y cuando vi que detenía su carrera, me temí lo peor. Una sombra de un tamaño descomunal nos impedía el paso, era imposible hacerle frente. Intentamos esquivarla, pero no sabíamos dónde estaba la entrada. Zebra, demostrando una pericia increíble, vio en la pared de la montaña unas runas. ¡Esa debía ser la entrada! Fui corriendo hacia allí y efectivamente se trataba de la puerta. El elfo sacó una fuerza oculta en él y la abrió, pero habíamos llegado tarde para Perseo. La Sombra lo había engulllido. Quise ir a ayudarle a la desesperada, pero mis compañeros me hicieron entrar en razón. El maestro kkaskkasdksdsdir (mi mentor entre los dragonuts) siempre me advertía que mi afán por ayudar a los demás algún día terminaría conmigo. A sus ojos no era lógico arriesgar la vida por salvar otra vida, cuando al fin y al cabo, lo importante era la misión. Puede que sea fruto de mi inexperiencia o de mi estupidez, pero siempre pienso que las cosas están tan mal, que no se puede ir a peor. Mientras divagaba por mis pensamientos, no sé cómo, pero la Sombra se redujo a la mitad, y de pronto Perseo salió de su interior. Tras luchar en vano contra ella, conseguimos penetrar en el túnel. Habíamos sobrevivido a la oscuridad.
Luego penetramos por la hendidura, cuyas paredes estaban grabadas con runas, y finalmente llegamos a una galería en la que el camino se separaba en tres. ¿Cuál elegir? Difícil elección. Elegimos el del centro, y nada más entrar un espíritu nos advirtió que los que entraban no salían. Seguimos avanzando sin apenas hacerle caso. Íbamos marcando el
camino para no perdernos, pues era un auténtico laberinto. Tras una hora de camino nos sentimos perdidos, y quisimos regresar atrás para empezar por el principio. Para nuestra sorpresa, las marcas habían sido borradas, y eso sólo significaba que estábamos encerrados en un laberinto lleno de trampas. El único que pareció entender lo que sucedía fue Zebra, que presa del pánico, comenzó a desconfiar de nosotros. Tuvimos que atarle y amordazarle. Mientras tanto, Shark iba soportándolo.
Intentamos buscar todos los caminos que subiesen, pensando que así llegaríamos a lo alto del cráneo. Tras mucho caminar, giramos un recodo y vimos una ténue luz azulada. Me adelanté para ver qué era aquello, y vi a un colosal guardia no muerto, custodiando una puerta de cobre con un hacha. La luz azul, estaba arriba de la puerta.

SOMBRA Y SUS SECUACES
Todavía estamos en la maldita ciudad de Ockless…
Antes de ser transformada en gato quiero dejar constancia de lo que ha sucedido en nuestra jornada.
Estábamos en casa del dueño del pato, cuando de pronto comenzamos a discutir y el ambiente se fue caldeando. Sherk hirió al líder llamado Sombra. Por mi parte, el principal objetivo de nuestra estancia en Ockless es dar con el prisionero, y si para ello hay que aliarse con la oscuridad debemos hacerlo. Así que comencé a intentar calmar los ánimos y como muestra de buena fe, entablillé la pierna de Sombra, pensando que podríamos llegar a entendernos, pero para nuestra desgracia no fue así. Mientras conversábamos con Sombra, el pato avisó a la mangosta de que llegaban sus secuaces para matarnos. De pronto, se formó un incendio en el sótano (que más tarde supe había generado Eminono) y salimos corriendo. Sombra pensaba que había sido el pato el que lo había prendido y salió corriendo tras él gritando - ¡Lo mato, lo mato...! -. Con una ilusión de camuflaje creada por la mangosta pudimos salir de la casa y atrapar a uno de los francotiradores que había en una granja de al lado. Se trata de un joven, inexperto y asustado. Los espíritus se han puesto de nuestro lado y hemos encontrado el arma que nos mostrará el paradero del prisionero. Se llama Greiskull, y ha descubierto que el templo está cerrado ante una visita que debe llegar hoy. Debe ser Kark, y si se nos adelanta, tendrá en poder el anillo y por tanto, si la leyenda es cierta, el control sobre los gigantes. Tenemos varios problemas que resolver:
- El gremio de ladrones de la Sombra formado por 30 personas, nos persigue.
- Debemos entrar en los túneles y encontrar el camino hasta el templo, sorteando todos los peligros que ello conlleva.
Estamos en la posada intentando entrar en la bodega…
Saqueamos al troll y hemos encontrado 4 llaves grandes. Subimos las escaleras y habian 40 huecos con cabezas momificadas.
Arriba, Eminono buscó entre los desperdicios trolls pero no encontró nada. El resto continuamos hasta la sala contigua y vimos 4 portones. El primero solo tenía agua y estaba vacio. En otra estaba Acrómetes, el amigo desaparecido de Maugre hacia ya 7 años. En otro portón, metidos en agujeros estaban:
- El hijo de un noble que insultó a un troll (Lord Walthus Crue)
- Un porquero que iba a ser sacrificado. Dice que hacen sacrificios de dos personas.(Ostagrazzi)
- Chernko Chan, el ladrón que descubró donde estaba el anillo.
Después de regresar sobre nuestros pasos hemos salido por la necrópolis. Perseo ha visto esta runa.
Hemos buscado otra salida porque habian espectros. Hemos salido a 1 km de la linde del bosque.
Chernko Chan nos ha contado que se celebraba una gran fiesta en los jardines privados del castillo y se acercó con un amigo a robar a todos los nobles que se reunieron. Escuchó a Marusa y ha Halcyon decir que ya estaba hecho y que sólo les faltaba encontrar el anillo. Entonces fue cuando al ladrón se le ocurrió la idea. Como Ockless era una persona solitaria y muy celoso de sus posesiones (incluso obligó a matar a sus descendientes para que no se quedaran con sus riquezas...) debería estar enterrado en un lugar en el que nadie pensara que se iba a ocultar. Pues ese lugar debía ser el mausoleo situado en la necrópolis, y encima, nadie sospecharía que se había enterrado bajo el símbolo de Zar (Runa de la figura) pues odiaba hasta la muerte a su padre.
Ahora tenemos que volver al mausoleo, bien por los pasadizos repletos de espíritus y con la posibilidad de perdernos para siempre, o ir por la superficie, y sortear toda la vigilancia del castillo.
Salida de la cloaca, huracán y conviviendo con babuinos.
Marcamos la entrada a la gruta subterránea, en caso de querer acceder a la necrópolis por ahí.
Decidimos ir hacia Surlt para reponernos.
Al mirar hacia Ockless por última vez, observamos que allí nieva copiosamente, sin embargo donde nosotros estamos hace frío pero no nieva. O bien se trata de un capricho de los dioses, o es que estamos en la Estación de las Tormentas.
Los primeros dias el camino se hizo ameno, pero de pronto, el viento comenzó a soplar con fuerza y se convirtión en un auténtico huracán.
Por desgracia, un árbol cayó sobre nosotros, pudiendo escapar del golpe, la mangosta, Acrómetes y yo. Rápidamente, practicamos primeros auxilios a los que estaban peor. En esos instantes todo era un caos, cuando quisimos darnos cuenta, el hijo del noble y el pobre porquero habian muerto.
Cuando parecía que todo estaba perdido, una roca inmensa cayó, dejando abierta la entrada a una cueva. Allí descansamos y pasamos la noche.
Nos despertamos sobresaltados, y la mangosta acusaba al pato de haberme robado el dinero. El durulz tenía mi bolsa sobre su pecho. Cansada de haber tratado de dialogar con ellos en numerosas ocasiones, le hice un gesto al Cherko Chan, y nos fuimos los dos hacia Surlt. Seguramente allí encontremos un grupo de gente más preparada para abordar la misión que nos ocupa. Los espíritus habían hablado...
De nuevo, escuché la voz de ellos tras nosotros. No sé si podía soportar mejor al espíritu que me dominaba, o a esos dos discutiendo por el dinero. Cuando estuvieran enterrados, todavía podría escuchar a sus espíritus, pero entonces cogería su dinero y se lo daría a cualquier pobre que me encontrara por el camino...
Divagando yo, se presentaron unos babuinos con ánimo de comerciar. Nos quedaríamos con ellos unas semanas para ayudarles con todos los desperfectos ocasionados por el huracán, y a cambio nos curarían y quitarían los espíritus.
Tras deshacernos de unos cuantos grifos, vimos un espia del ojo observandonos. Le perseguimos, pero se escapó. Decidí que debia arriesgarme a dar con él, pues era primordial regresar a Ockless a por el anillo, y si delataban nuestra posición, no tendriamos otro remedio que cobijarnos en Surlt, o incluso en Nidik.
Desafortunadamente me tendieron una emboscada, y tras evadir las piedras que me lanzaban con sus hondas, conseguí escapar. Lo peor es que con los exploradores veni una mujer con una sombra. De regreso me topé con otros soldados menos experimentados, que no supusieron problema alguno. Ahora vienen a por nosotros...
Los babuinos no saben como afrontar la situación. El chamán consulta constantemente a los espíritus, y el abuelo le dice que allá donde vayamos nos acompañará la muerte. ¿Me pregunto si en aquella búsqueda sucedió algo más, y nosotros somos el gran secreto que ansiaba Vivamort? ¿Somos la muerte? Quizá por ello somos valiosos para ellos...a lo mejor para eso nos necesitaba Kark...
Los gritos de un babuino guerrero me devolvieron a la situación. Proponía que fuésemos al Norte, a cobijarnos al bosque de los elfos. No me pareció mala idea. Estar con los mios me devolvería algo de paz, y contarían de seguro con buenos chamanes para deshacernos de los espíritus que habitaban en nosotros. Emprendimos camino sin mirar atrás, pero notába al chamán preocupado, indeciso...
Finalmente comentó que en el bosque de los elfos sólo había muerte. Es cierto, que habíamos visto aquel árbol rodeado de no muertos, pero el bosque de los elfos era una basta extensión, y no podía pensar que todo aquello fuese ahora era podredumbre. Con el corazón todavía más aflijido, tuvimos que hacer frente a otro revés. Los babuinos querían que nos fuesemos, dejando atrás un rastro para que ellos pudiesen escapar. Antes de marcharnos, le pedí unos espolones de grifo a cambio de lo que habíamos hecho por ellos estos dias.
Pusimos rumbo a Surlt, pero en poco tiempo nos habían alcanzado. Debíamos luchar para intentar acabar con ellos. Si nuestra ofensiva
resultaba buena, podríamos vagar por la isla más o menos tranquilos. De lo contrario, siempre los tendríamos con los pies en nuestros talones.
La lucha dio comienzo. Entre Charnko, Eminono y yo, acabamos con la Sombra. Los cuatro exploradores, al principio, nos lanzaban piedras con sus hondas, pero luego, las cambiaron por lanzas cortas y escudos. Sucedió algo digno de mención durante el combate... Uno de ellos me dijo que iba a probar la magia de la que está por venir. Pensé que sería una estupidez fruto de su arrogancia, pero lo que parecía un simple conjuro común, fluyó hasta mí como onda de intenso color escarlata, mientras consumía el aire que se agitaba a su alrededor. Cuando llegó a mi, sentí que algo quería entrar en mi mente para que bajara la guardia, una sensación de amistad, paz quería penetrar en mi. Afortunadamente, conseguí vencerlo y no caí en sus garras. Era una magia muy poderosa, desconocida completamente para mí.
Enfadado, inició una carga hacia mí, y conforme se acercaba le clavé la garra en su pierna izquierda destrozándola por completo. Dada su inercia, se precipitó sobre mí sin causarme daño...
HUYENDO Y SOBREVIVIENDO A LA IRA DE ORLANTH
Continuamos luchando contra los soldados, y cuando ya casi les habíamos vencido, apareció otro grupo con un grifo no muerto sobre sus cabezas. La aberración voló en picado hacia Rakzos y Perseo, que estaban trabados en combate; la muerte era algo inminente, y sucedió algo inesperado. Perseo lo vió y clavó su lanza en el suelo esperando su envestida. La lanza se clavó en su cabeza y le arrancó un trozo. Entre el polvo que se levantó no veía a Perseo, y finalmente cuando se disipó, estaba intacto, con el valor clavado en su mirada.
Los problemas se fueron sucediendo. Una horda de trollkins se dirigía hacia nosotros, lo cual hacia suponer que sus amos, los trolls, estarían en la retaguardia como cobardes que son.
Unas sacerdotisas invocaban una serie de remolinos rojizos, mientras el cielo se tornaba oscuro. Esas cosas, parecidas a silfos, emprendieron camino hacia nosotros. Había que salir de allí con premura.
De pronto, un muro de oscuridad nos envolvió. Me dirigí hacia mis compañeros e intenté guiarles con mi voz. Corrimos como si no hubiera un mañana, y así conseguimos escapar de ellos.
El miedo estaba inyectado en nuestros corazones y continuamos corriendo hasta casi llegado Surlt. Allí, con una temperatura bastante agradable, empezamos a ver el cielo anaranjado, y un olor bastante característico (como a volcán). Al momento, todo comenzó a agitarse brutalmente a nuestro alrededor. Yo no sabía que hacer, pero el orlanthi nos dijo que permaneciésemos en el centro del pie de Orlanth, pues estaríamos a salvo. Igual que llegó se disipó, dejando una calma absoluta. Sin embargo, se formaron de nuevo otra serie de remolinos más pequeños que se movían erráticamente a nuestro lado. Intentamos esquivarlos, pero nos atraparon. Mientras estaba volando vi que mis compañeros estaban un poco por debajo de mi, dando vueltas en aquel torbellino. Pensé que mi muerte estaría cerca, y sólo se me pasó por la cabeza, si el pato habría conseguido al fin volar... Un golpe seco, y la oscuridad vino a nosotros.
Pero el día volvió. Despertamos en una cueva, con una mujer blanca a nuestro lado. Ella y el Rey Yalaring habian provocado aquello para salvarnos.
Dushi Sone, la chlanita, nos estaba curando cuando de pronto apareció Chernko Chan y nos advirtió con gestos, intentando que no le viera. ¿Qué pasaba?
Lo cierto es que todo era muy extraño, nos había curado hacia ya bastante tiempo, pero seguíamos sintiendo el mismo dolor.
Cuando la mujer volvió, nos refirió que iba a curarnos. ¿Pero no nos había curado ya? Al explicarnos ambas partes, nos dimos cuenta que alguien se había hecho pasar por Dushi Sone. ¿Quién sería la persona que nos había engañado?
Dushi Sone iba acompañada por su sobrina, la líder del grupo, que llamada Pay Surney. Era una mujer influenciable y bastante insegura. Andretta parecía su mano derecha, y no se separaba de ella en ningún momento. Ambas eran iniciadas de Orlanth.
Otros dos orlanthis y un seguidor del Toro Tempestuoso formaban el grupo, Fretic Bombest, Dalfar Buscador del Cielo, y Harken Seye, respectivamente.
Al principio nos dijeron que iban protegiendo a Sushi para que realizara sus curaciones, sin embargo, luego averiguamos que estaban buscando la espada de los vientos, y no querían que Torath Manover se les adelantara.
Al ver que iban viajando por la Isla, les pregunté por Gábriel. Como siempre, al principio no se acordaban, pero poco a poco comenzaron a recordar ciertos datos.
Los vieron al Norte de las montañas de los enanos, y se dirigían hacia el Este. Gondo les llevó.
La mujer de la tienda nos advirtió sobre la desaparición de Riguirika, la prometida de Totakeke, una estación después de que nosotros nos fuésemos. Investigamos sobre eso entre las mujeres, mientras esperábamos ser juzgados. Unas decían que como no hacia sus tareas los espíritus del agua se la habían llevado. Otras, que se había ido hacia los bosques del sur. Incluso que era Granni (Cara Azul nos dijoque Granni era Gabriel).Finalmente, una mujer anciana y bastante sabia, nos dijo que la siguió, y vio que se había marchado a Surlt y embarcó en un navío de madera tripulado por piratas, y se habían encaminado al Norte.Parece que Riguirika escuchó algo gordo que se llevaban entre manos algunos hombres del clan y gente de la ciudad, y comprometía a Totakeke. Así que se fue a buscarle para advertirle.Entonces nos vino a la mente, unas palabras de Totakeke cuando lo vimos por última vez en ruinas Calavera.El pato que viajaba con nosotros hace varias estaciones, tenía la memoria borrosa sobre algo de una cabaña al norte de Pto Soldado. Marussa y Cyriel buscaban al durulz. Un espíritu de inteligencia se lo dijo a Totakeke, y un fogonazo de Riguirika también se le cruzó.Mientras esperábamos, decidí ver a los espíritus que nos rondaban. Eran tan oscuros como el carbón, y sus brillantes ojos rojizos se clavaban en nosotros. Una visión realmente aterradora.Finalmente fuimos llamados ante el consejo, y hubo una ronda para poder defendernos. Hubo un momento importante, y fue cuando Eminono, contó que él había visto a Riguirika en el barco, y que buscaba a Totakeke porque intentaban conspirar contra él. El consejo se puso en alerta, y Morarin, también perdió los nervios, pero tenía un as en la manga, y obligó a revelar a quién adoraba Eminono. Ser seguidor del embaucador no es muy honorable,
por no decir que son proscritos ante la ley. Así que la revelación de la mangosta cayó en saco roto.El veredicto era firme. Uno de nosotros se introduciría en el agua. Si el espíritu de la trucha lo mataba, los otros serian expulsados del clan. Si no, podríamos volver al clan como siempre.Así que me introduje en el agua, y sentí como la trucha se metía por mis fosas nasales, y me asfixiaba por completo. Cuando ya estaba a punto de desfallecer, sentí como me sacaban del agua, y el anciano proclamaba, que el espíritu de la trucha nos consideraba inocentes, y éramos bienvenidos en el clan.Nos quitaron los espíritus malignos a cambio de una espoleta de grifo.
Dia 231, amanece fresco y cubierto
Vamos a Surlt a investigar la desaparición de la prometida de Totakeke. Nos dicen que de saber algo sobre el barco de los piratas, serian los porqueros. Nos vamos hacia allí, y nos encontramos con los soldados cazadores del Rey. Nos dicen que debemos ir urgentemente a ver a la Reina.
Según vamos avanzando hacia el Castillo, la gente curiosa nos mira con preocupación. Djimith nos insulta cabreado, y nos acusa de haber matado a gente en su posada. Un crio también nos acusa de haber matado a sus padres.
Finalmente nos reciben en la sala de audiencias.
La Reina nos dice que Surlt se ha llenado de muerte desde que nos fuimos, y que Yalaring se ha ido para no volver. Parece que la reina está algo ida, ha descuidado sus obligaciones, y parece que sus propios soldados la temen.
En un principio, nos sentencia a morir, pero tras las palabras de sus mano derecha, decide que uno de nosotros morirá, y el resto serán apedreados.
Nos llevan a una habitación en la Torre, y custodian la puerta. Tenemos que elegir a uno para morir, sin embargo nos pasamos toda la noche intentando buscar una salida.
Al final, los guardias vienen, y el pato en forma de gato sale corriendo. A los demás nos llevan al patio del Castillo para ajusticiarnos.
Cuando nos pregunta que quién de nosotros morirá, dudamos unos instantes y al final Artuk se presta voluntario. Después yo también me ofrezco voluntaria.
Cuando nos llevan hasta el lugar, Dushi Sone aparece, y le dice a la Reina que no puede romper el pacto con Chalana. De pronto se escucha un grito, y un soldado viene sangrando por el cuello y diciendo que le han atacado, que había matado al ser en la muralla. Ante el desconcierto vamos todos hacia allí, y comprobamos que es un no muerto el que ha atacado al soldado.
Un momento después, aparece por el callejón una mujer orlanthi, Wilarnia, diciendo a Vania, que el Rey estaba vivo la última vez que le vio. Nosotros aprovechamos la ocasión para decirle que podemos ir a por él. Lógicamente, a la Reina le falta tiempo para enviarnos a por su marido.
Así que nos encaminamos hacia la Garra del Oso, para rescatar a Yalaring, y para luchar contra no muertos.
Dia 232
Cuando estamos a punto de salir a por Yalaring, los soldados de la muralla avistan un tornado. Rápidamente nos refugiamos en el templo, pero perdemos de vista a Eminono, que ha ido a buscar a su familia.
Mientras, Perseo reza en su templo, y yo pregunto entre las personas que allí se refugian, por la prometida de Totakeke, pero nadie sabe nada.
De pronto, se escucha una explosión y los cerdos y porqueros, entran dentro de la ciudadela de Surlt.
Al parecer a los sacerdotes de Orlanth les está costando controlar el viento y los rayos.
Pay entra en el templo con todo su grupo y vienen magullados.
Dia 233
Cuando llega Eminono, nos vamos a por Yalaring y los caminos estan tranquilos.
Dia 235
LLegamos a los alrededores de la Garra del Oso. Hay grupos dispersos de pescadores no muertos y también de Durulz.
Nos encontramos con un grupo de soldados del Rey y están llenos de mordiscos. Esperemos que los mordiscos no los conviertan, seria interesante observarlos para saber qué hacer con los heridos.
Matamos a un grupo de tres. Atacando a la cabeza parece que mueren de inmediato.
Desde un árbol oteo el asentamiento, y parece que una witer ayuda al clan, no es posible que sólo vivan de la pesca.
Decidimos entrar por la parte más cercana al templo, pero está situado hacia el centro, con lo cual tendremos que intentar pasar desapercibidos. Cuando llegamos a una empalizada que habian construido los habitantes para protegerse, escucho ruidos de muebles dentro de una casa. Los no muertos son muy sigilosos, y no parecen poseer mucha inteligencia, así que me introduzco en la casa con cautela por si fuera el propio Yalaring el que intenta protegerse.
Al entrar, Wilarnia viene detrás de mi. Sigo el pasillo, y al girar hacia la izquierda, hay una puerta abierta, y una niña llora a los pies de alguien que está en el suelo. Se oye ruido de alguien comiendo. Me acerco por si la niña todavía no hubiese sido transformada, aun sabiendo que lo más probable es que también sea un no muerto.
Evidentemente, al acercarme, ella y otro zombie que se está comiendo al del suelo se dirigen hacia mi. Wilarnia desde el pasillo, mata con una flecha al que antaño fue un hombre, y yo me ocupo de la niña.
De pronto escuchamos a Eminono gritando que viene una horda de 20 no muertos. Rápidamente, cojo un barril y lo pongo delante de la puerta de la cocina, y luego cierro la puerta. Si sólo tienen una entrada hacia la casa, será más fácil ir matándolos.
LUCHANDO EN LA CASA
Luchamos en la planta de abajo de la casa intentando contener a la horda, pero eran demasiados. Artuk lanzó canicas para que se resbalaran al entrar, y yo coloqué un mueble delante de la puerta para atrancarla.
Poco a poco fuimos abriéndonos paso como pudimos, hasta que tuvimos que dejar atrás a Wylarnia, que valientemente se quedó luchando contra muchos no muertos.
Corrí hacia arriba, y abrí la puerta de la primera habitación que me topé. Afortunadamente tenía ventana, y no dudé en salir al exterior.
Desde allí vi el templo, y el tiempo ahora era lo que nos podía hacer más fuertes, así que bajé y me puse a correr hacia allí. Artuk está detrás de mi corriendo. Y Eminono continua en la casa.
LUCHANDO CONTRA EL NIGROMANTE
Perseo, Alura, Kratos, Artuk, Wylarnia y yo, hemos combatido contra un nigromante y sus dos no muertos. Esos seres tenían dos corazones verdes, uno en la zona abdominal, y otro en el pecho que les proporcionaban poderes muy potentes.
Después de luchar con valentia durante mucho tiempo, o morían ellos o nosotros, y finalmente el botero de la penumbra nos ha guiado, llevándonos a la victoria. En cuanto nos recuperamos volvimos a por Yalaring, y Artuk sanó sus heridas gastando dos usos de su anillo sanador.
Conversamos con Yalaring sobre lo que había visto Alura en el bosque. Al parecer o alguien ha traicionado al Rey, o bien, alguien se está haciendo pasar por él. No deberia ser complicado averiguar cúal de las dos opciones es la correcta.
Alura vio a los hombres del Rey negociando con gente de Ockless, con un hombre encapuchado y guantes negros, y un perro de piedra enorme. Hablaban sobre una mujer que tenía un mapa, y que lo necesitaban para poder hacer algo.
La mañana que Alura vio al Rey, Wylarnia estaba de guardia, y no vio nada extraño.
La mujer del mapa, creemos que es la esposa de Totakeke (un compañero nuestro votanki fallecido, y lider del clan Trucha Arco Iris. Hemos descubierto que su hermano quería traicionar a Totakeke con gente de la ciudad, y sus esposa se enteró. Creemos que habló con los piratas en Surlt, para que la llevaran a algún sitio, y tenemos que averiguar a dónde se fue).
Hemos tocado los puntos sobre el enfrentamiento de las ciudadelas, y Yalaring opina que:
NIDIK- Son unos buitres carroñeros esperando a que alguien de el primer paso.
OCKLESS- Parece que es la que más se está moviendo, creando armas de asedio.
Además piensa que los enanos son mucho más fuertes y le preocupan más que los trolls.
De los elfos no le extraña que no se decidan a dar un paso.
Yalaring piensa que Arachne Solara (la diosa que controla el tiempo), nos ha enviado a la Isla porque podemos frenar a la muerte. Sin embargo, no nos olvidemos que también somos valiosos para nuestros enemigos, puesto que todavia continuamos con vida, y nos utilizaron en aquel ritual que realizaba Gondo.
Le he hablado también del anillo de Ockless, y aunque al principio de ha
reido de nosotros diciendo que eso sólo eran cuentos, después nos ha dicho que si lo encontráramos y se lo entregáramos a Surlt, nos estaría eternamente agradecido (viviriamos en Surlt, nos protegerian, alimentarian...).
He mencionado lo de la Llama-Tumba Troll, y dice que es un rio de lava, pero que no sabe dónde está. Y la lista que le hemos enseñado no le dice nada absolutamente. Recordemos que el enano de Nidik, Buscavetas, nos dijo que si robábamos el trono del Rey de Nidik (que era de madera) nos daria información sobre la Llama.
Tras examinar la sala de detrás del tapiz, y no encontrar a nadie con vida, ni por qué tenían sus aposentos escondidos tras la enorme tela, formamos dos grupos. Razok, Wylarnia y Eminono, partirian en busca de algún superviviente de la familia de Razok, y Alura, Yalaring, Perseo y yo, nos dirigiríamos a la cabaña de Alura.
Nuestro grupo se encontró con un paraje desolador al llegar allí. Violeta y otros animales queridos por Alura, yacían calcinados en el suelo. Los dos hombres se adentraron en la casa, que también había sido pasto de las llamas. Nosotras, mientras tanto, vimos una flecha manchada de brea clavada en el lomo de uno de los animales y la cogí para mostrársela a los hombres.
Al rato, salieron con buenas noticias según decían. No había ni rastro de los familiares de Alura, y faltaban el burro y la yegua. Yalaring afirmaba que todavía había esperanza, sin embargo, la esperanza es una mera casualidad en un conjunto de probabilidades bastante escasas. A menudo acostumbro a escuchar a los espíritus que no han podido cruzar al otro lado, y no vislumbro esperanza. Tan sólo recuerdos marchitos, intenciones no cumplidas... con todos mis respetos, Yalaring, debemos tener los pies en el suelo, y no dejarnos llevar por los sentimientos.
Tras dos dias de camino hacia Surlt, no hemos encontrado grandes inconvenientes. El frío ha sido nuestro peor enemigo, pero gracias a la los conjuros de Razok y Alura, el trayecto ha sido agradable. Sin embargo, nos ha inquietado ver cada vez a más no muertos. Casi todos ellos
pescadores y campesinos. Pocos piratas, y gentes de todas las razas (votankis, aldryamis (elfos verdes), trolls, mostalis, patos...).
Al divisar las columnas de humo saliendo de Surlt, el Rey se ha puesto muy nervioso y le ha hablado muy mal a Wylarnia. No atiende a razones. Los no muertos en cantidades ingentes rodean la ciudadela, y un pelotón de unos 30 hombres huye por el puente. Al ver al Rey, algunos hombres albergan ese sentimiento de esperanza, y este les infunda valor con un sabio discurso. Wylarnia con un conjuro orlanthi, lleva las palabras del Rey hasta dentro de la mismísima Surlt, y las tropas aumentan su moral.
Yalaring y su grupo de cazadores, y por otro lado Perseo, comandando a la infanteria, atacan al grupo de la parte cercana al Río.
La caballería de Pay Surney, intenta contener a una horda que se aproxima hacia las puertas. Eminono, comandando al grupo de Zogrosh, utiliza una astuta táctica de engaño, para atraerles hacia el Río.
Alura con los arqueros, y yo con la falange, tratamos de acabar con los no muertos de la brecha de la muralla.
La batalla continúa...
Cuando los trolls aparecieron pensé que todo estaba perdido, sin embargo, una unidad consiguió hacer frente a la primera línea de trollkins, y los asquerosos uz volvieron a las sombras de donde habían salido. Lo que no sabíamos es por cuanto tiempo.
El caos que provocó la batalla, y la horda de no muertos, se veía por todas partes en Surlt. Casas incendiadas, cadáveres…
Antes de nada, quise cerciorarme de que ya no éramos considerados enemigos de la Reina, al haber demostrado que no mentíamos, respecto a que Yalaring estaba vivo. Efectivamente, el Rey nos demostró que era nuestro aliado, y públicamente alabó nuestros méritos.
Nos reunimos todos en la posada del Ojo Rojo, que ahora estaba vacía. Chernko Chan no se fiaba del hombre misterioso que nos había ayudado cuando luchamos contra el nigromante. Sin embargo, yo pensaba que podría sernos útil para entrar en la necrópolis de Ockless. No tenía sentido que quisiera traicionarnos si había arriesgado su vida por ayudarnos. Aun así, lo observaría de cerca por si me confundía. A Acrómetes ni se le pasaba por la cabeza volver a Ockless. Insistía en que debíamos ir a Puerto Soldado para reunirnos con Maugre, que él sería un buen aliado, pero no lo recordaba así la última vez que salimos de aquella ciudad. Acordamos salir en unos pocos días hacia Ockless ahora que los trolls estaban merodeando por Surlt, sin duda era nuestra mejor baza para conseguir el anillo. Seguro que, si llegaba a nuestro poder, conseguiríamos buenos aliados, si era cierto que se podía controlar a los gigantes con él.
Aproveché para conocer mejor al hombre misterioso, y fuimos a buscar información sobre la prometida de Totakeke. Fuimos al embarcadero y preguntamos por el comisario, pero había muerto. Nos señalaron la caseta dónde guardaba los registros de barcos; cogimos un libro, y dado que no sabíamos leer, tuvimos que llevárselo a una conocida del hombre misterioso, que trabajaba en la posada. Parecía haber entre ellos una cierta atracción, aunque ella fuese bastante mayor que él, y luciera también más barba. Entonces me vino a la mente el comportamiento de Artuk con las mujeres, y pienso que algunos humanos son un poco raros.
Al día siguiente, la mujer de la posada nos dijo que había visto algo raro en el libro. El día que la prometida de Totakeke desapareció, había venido Tarn el Tigre, y su barco iba con destino a Puerto Soldado, y luego estaba tachado.
Nos juntamos con Allura, que había estado haciendo una gran labor ayudando a los heridos. Fuimos a devolver el libro a la caseta, y encontramos a Jicnix. El nuevo joven comisario. Al preguntarle a él nos ayudó mucho. El Fuego Espiritual pasa cada 3 semanas, viene con mucha carga, 200 kg pero sólo descarga 40 kg. El joven piensa que tocando una de las cajas que transportaban averiguaría algo más. Efectivamente, ve una pequeña cala oculta, un volcán, muchos piratas, campamento, mar. Muchos hombres y mujeres. En su visión, puede ver a
hombres del Rey metiendo a una mujer en una caja y recibían dinero de los piratas. La humillaban.
Cuando salimos del almacén no podía de dejar de pensar en la caja. Me vino a la mente las bolsitas de materiales de alquimia con la que traficaban en puerto soldado, y que distribuía clandestinamente Gondohost. Parecía que los tres estábamos pensando lo mismo. Allura se nos adelantó y abrió la puerta del almacén, con tan mala suerte, que fue vista por un lugareño, que corrió a advertir a los soldados. Cuando estos nos preguntaron, el hombre misterioso dijo que nosotros sólo paseábamos por allí, y acusó a Allura de ser la ladrona. No me esperaba que fuese capaz de acusarle; y no parecía tener ningún remordimiento de lo que estaba haciendo. ¡No sabía qué hacer! De pronto, el hombre que nos había delatado comenzó a decir que se había confundido, que no había nadie. Mientras decía esto hacía gestos muy raros. El hombre misterioso mencionó que ese hombre estaba claramente borracho, y afortunadamente los soldados parecieron creerle y se marcharon.
Dentro del almacén, Allura había abierto la tapa de la caja, no sin antes hacerse daño, por el dolor que mostraba en el brazo cuando entramos, y mis suposiciones eran ciertas. La caja contenía frascos y polvos de alquimia. Cogimos unos cuantos.
Los slarges, el fallecido Gondohost y por tanto Kark, los piratas, y ahora los soldados de Yalaring estaban traficando con materiales de alquimia. Puede que la prometida de Totakeke descubriera quien estaba traicionando a Surlt. Yo pondría la mano en el fuego por Yalaring, pero no por su mujer y sus hombres. Y menos por el maestro cazador.
Dia 247 Noche
Me siento con los porqueros. La gente no sabe si la fiesta sera como la de otros anos. Otros quieren que sea mas austero. Dicen que Jou esta descuidando la posada. Por la puerta entra un tipo con bufanda y tapado. En voz baja el hombre le pide a Jou un lugar solo y cerca de la chimenea. Es que hacen -9 grados. Entre las conversaciones, se oye gente hablando de la comida. En otra mesa, un tipo grasiento, esta ebrio, habla sobre que se prepara algo gordo. Aqui no haremos nada, pero los votankis de esta asquerosa ciudad estan preparando algo para atacar
Ockless. Es un porquero. La gente se va borracha. El tio se saca una pipa y se pone a fumar. Me escondo en la escalera. Después de 1h30 algunos cantan y cantan fatal. El tio se va hacia el centro. Le pregunto a Djimn y no le conoce. No quiere que estemos tanto por la posada. Al dia siguiente todas las mujeres van cantando por la calle. La temperatura de 19 grados. Hoy no parece que los Dioses esten enfadados.
El novio tiene que hacer una búsqueda heroica, y pruebas fisicas, para ver quien se queda con la chica.
Djimn esta muy salido cuando ve a Allura, y le prepara un desayuno de pastor ( cecina, tocino...) para que se ponga moza.
Luthien se va al templo a buscar a Jou. Me dice que me puede ayudar gente de babeester gor, yelmalita y humaktita. Pone un cartel en la posada para exploradores.
Negocio y cuestan, yelmalitas/humaktitas 1Mp al dia. 5 yelmalitas. En total, 100MP. Ya he pagado 25MP.
Luthien se va a a su clan.
Un yelmalita, llamado Martrax, pretende a Allura. Es hijo de una de las familias nobles de Nidik. Estan peleando en plan pertenencias con Djimn.
Me voy al clan, el primo totakeke acepta mi regalo de oro, dice que como mucho nuestra relacion va ser de respeto. Mujer me dice que tengo que encontrar a la prometida de Totakeke, porque sabe lo que se cuece con Marussa ( o una mujer guapa morena ) y otro que viene de fuera de la isla (kark). No sabe nada de que otros clanes quieran atacar Ockless.
Mientras, en otros lares, los hombres han competido por la mano de Allura. ¡Gana Djimn!
Comienza la búsqueda heroica después de comer. Todos los de Ernalda durante la ceremonia ven una imagen de la diosa. Es 3 veces más grande que un humano. Bendice a la mujer y al hombre, y todos entran en frenesí. Se hace un bendecir cosechas. Cuando acaba, notamos una sacudida violenta en el templo. Ha sido un temblor. Las sacerdotisas tienen miedo de que la diosa no les escuche, pero intentan tranquilizar. Allura cura a un hombre y le besa las manos. Una de las sacerdotisas tiembla y al hombre al que cura también. Le salen pústulas, y la gente se asusta. Le dicen a Allura que es una portadora de la muerte. Allura explica porque la sacerdotisa falla. Viene una de Babeester Gor y Dushi Sone. Calma a las masas. Explica que la diosa ha curado, pero que hay otra fuerza que lo impide.
Jou me dice que averiguemos quien comercia con el contrabando. Me encuentra a dos exploradores. Uno de costa y otro del Este. Se muestran reticentes y me cobran el 1MP y 2PC/dia y volver de vuelta a una ciudad. El que conoce el Este se llama Grager.
La madre de Allura le riñe porque no entiende que se haya unido a nosotros. Y le pega un tortazo. Se marcha. Su familia no cree en ella, y eso le molesta.
Los babuinos buscan la isla putrida, porque es el lugar donde esta el mal, y sus chamanes les han dicho que vayan a buscarla. Dicen que es un rincon del Caos. A lo mejor alli esta Gabriel. Intenta buscar info de la Isla putrida. Dice que los elfos saben donce está.
Dia 249
Amanece un dia congelado. El mas frio hasta ahora. Allura me dice que estan atacando a Jou. Intento romper la puerta, y sale Jou escandalizado. Allura tiene que pagar la puerta.
Yo me quedo descansando y practicando el rasgo, y Allura se va con su elemental al templo.
Dia 250-253
Igual de malo. invocan elementales de fuego los de yelmalio.
Dia 254 (dia agua)
Mejora pero la nieve esta acumulada.
Dia 255
Sube la temperatura y se despeja un poco.
Nos alejamos unos dos kilometros en direccion a Nidik. Nos vamos a casa de unos ancianos. Un joven trabaja para ellos. Ella se llama Eucleya, y era de nidik. Me dice que le pusieron ese nombre en honor de la hija de los reyes. Me quedo extrañada, y me dice el marido que asi se lamaba la hija de zar. Pasan varios dias, el chico conoce un conjuro para que la nieve no se acumule. En una de las visitas de la vieja, sacamos que es una iniciada de Ernalda, y cuando parece que nos va a contar cosas, el
anciano interrumpe y le dice que se vaya a hacer otra cosa.La anciana reza a Ernalda, y Allura le pide si puede rezar con ella. No quiere que el marido se entere que esta en la habitacion, por ello le dice que no grite mucho. Allura escucha una conversacion entre los ancianos. "Viejo gruñon, esa mujer es una hija de Ernalda, y no quiero que entres y le molestes. El piensa que queremos cobrarle los impuestos que ha cobrado el Rey". El nivel de la nieve y la temperatura baja, el viento arrecia tambien. El dia 266 ya no se oyen crujir las maderas. Al mirar a traves de las ventanas, el cielo esta totalemente despejado y ya no nieva. Afuera la nieve ha descendido bastante y es muy agradable la temperatura, unos 20 grados. Pensamos volver a Surlt, y averiguar que ha pasado. Allura deja a la mula en la granja de los ancianos.Volvemos a Surlt, y unos guardias se acercan a nosotros. Nos preguntan quienes somos. Yo doy una identidad diferente. Uno de los guardias dice que el ataque a Surlt (el agujero del gnomo) parece que creen que hay alguien responsable tras ello. Creen que alguien ha ido a buscar a los portadores de la muerte. Allura se adentra a la ciudad. Quiere hablar con los guardias, que estan en el megalon, pero lo dice por despistar. Luthien se va a avisar a Eminono. Pero no pretende quedarse en su casa. Quiere entrar por el tunel de la posada de Regus Cabellos Blancos. Pero no lo encuentran. Asi que se va a la casa de los espias, que esta medio en ruinas, porque no ha soportado el peso de la nieve. Espera durante todo el dia a Allura. Al acercarse la hora, esta pendiente, y los espitritus le advierten de malos presagios. Efectivamente, unos bandidos llevan a Allura sobre el hombro. Parece inconsciente. Voy en sigilo y ataco con el arco a uno que estaba herido y llevaba ballesta. Mi espiritu se enfrenta con elque llevaba el garrote. Durante un rato de pelea, consigo que suelten a Allura y se vayan corriendo.Los guardias llegan y me preguntan que ha sucedido. Afortunadamente, uno de los guardias habia sido atacado por uno de los hombres. Temo por la vida de Allura e intento buscar ayuda, pero ella se despierta. Parece que esta bien. Ahora solo hay que salir de Surlt.
Eminono encuentra un hechicero que posee el hechizo succionar tamaño. Al salir de Ockless hace muy buen clima. El 274 se generan tornados, pero por suerte encontramos una cueva. Tras dos días en la cueva, vienen unos babuinos a refugiarse. Makash Khanes el líder del grupo. Son nómadas y vienen del norte. Iban a comerciar al sur.Conocen a los elfos, y son amistosos con ellos. Ellos huyen de los no muertos, pero
los elfos están en los centros de los bosques. No han estado nunca en las ciudadelas.El chamán ve espíritus oscuros y depredadores. Le pregunto si hay algún y culto parecido al mío, y me dicen que los voralanos puede... Los podemos encontrar bajo tierra, y los elfos rojos en los extremos de los bosques. No son pacíficos.Intentamos comerciar con ellos y lo más interesante que tienen son las hierbas.No han visto a Gabriel ni Eladar.Artuk se monta en el burro cuando el tiempo mejora y corre más que un caballo. Su intención es llegar a tiempo a la estación sagrada.Nosotros aceleramos el paso yllegamos el día 283 día de Mostal a Surlt.Surlt se está reconstruyendo, y Halcyon no ha pasado por la taberna. Errap hace unos días sí, pero no ahora. Mando un mensaje a Torath Manover para saber cómo van las cosas por Puerto Soldado, y si puede ponerse en contacto con Dorna, le digo que estamos por la zona de Nidik y le explico porque no pudimos ir a su encuentro. El día 285 partimos hacia Nidik todos menos Artuk y Allura
Partimos de Surlt hacia Nidik, Perseo, el hechicero de Ockless, el de eurmal, y yo.
Por el camino no encontramos nada importante.
Al llegar a Nidik nos recibieron unos soldados con armaduras doradas, y sobrevolaban la ciudad varios halcones. Luego vimos a los enanos de la Pidra Verde, e iban buscando a nuestro grupo para vengarse.
Nada más llegar fuimos a ver Buscavetas, y nos dijo que el trato seguía en pie. Debíamos dejar el trono fuera de la ciudadela, en unas ruinas. Le compramos unos trajes negros para pasar más desapercibidos durante el asalto.
El plan era que yo localizase un silfo para elevarnos facilmente sobre la cúpula.
Los primeros dias observamos los cambios de guardia, la cantidad de soldados que custodiaban las murallas, localizacion de las estancias etc...
Perseo y yo salimos en busca del silfo, y el resto se quedó en la posada de Ostaker Tres Cicatrices.
Estuvimos buscando por los alrededores de Nidik, y pasó algo extraño. Nos encontramos en mitad de un llano, un barco antiguo. Perseo y yo
subimos a bordo. Miré a ver si habian espíritus y estaba lleno. Los dos tuvimos visiones del barco surcando los mares. Al intentar acercarnos a la barandilla, una fuerza nos echaba hacia al interior. Perseo a fuerza de voluntad consiguió salir primero. Yo me quedé más tiempo atrapada. Todos los espíritus se habian quedado atrapados. Busqué al capitán y me dijo que los dioses le habian maldecido. Busqué en el barco, y encontré un amuleto de curacion (2), y unas pocas monedas en un cadaver. Al final, conseguí escapar, pero con un punto de PODER menos.
TRas reunirnos de nuevo, conseguí localizar al silfo, pero resultó tener muy poca intensidad, y no podía transportarnos a todos. Así que debíamos buscar otro plan.
Volvimos a entrar en la ciudad, alquilamos la habitación de la buhardilla de casa de Ostaker. Hicimos ver que bebíamos bastante y nos íbamos a "descansar" los cuatro arriba. La habitación no tenia ventanas; eran aspilleras como las de los castillos. El hechicero nos redujo el tamaño y salimos por alli los tres. Perseo se quedó en la casa.
El iniciado de Eurmal, nos lanzó un hechizo de ilusión, para parecer que éramos arañas. Cargué con ellos en la espalda y trepé facilmente con la adherencia que me confiere el espíritu.
El de Eurmal creó la ilusión, y el hechicero redujo el tamaño del trono. Bajé en sigilo con la cuerda y lo tomé, pero al subir uno de los dos soldados se giró, y al ver la cuerda, hizo el gesto de gritar. Afortunadamente, el hechicero, que ya estaba prevenido, creó una especie de jaula de cristal y no podía escucharsele. Fuimos todo lo rápido que pudimos, pues en breve, el otro soldado se daria cuenta. Al llegar a la posada, volvimos a entrar del mismo modo que habíamos salido. Todavia teníamos la ilusion que nos hacia parecer arañas.
Ahora había que sacar el trono fuera d ela ciudad, asi que yo sola, trepé la muralla, con una mochila que contenía el trono (ahora parecía una botella de licor) , y los trajes negros.
Lo dejé todo en las ruinas y volví a entrar en la ciudad. Salí y entré, yendo en sigilo por las zonas oscuras de la muralla, y con la ilusión. Al llegar a la posada, entré de nuevo por la aspillera. Al poco ya se oia el tañir de las campanas.
Nos desnudamos y nos pusimos a dormir. Al poco, unos soldados llamaron a la puerta, y abrimos rápido para que registraran la habitación y no encontraran nada. Nos dijo qué haciamos en Nidik, y les dije lo mismo que a los de la entrada. Veníamos a comprar armas, porque estabamos buscando la Espada de los Vientos. El guardia me dijo que nos tendría vigilados.
Al dia siguiente, bajamos, y Buscavetas y Ostakker jugaban al ajedrez. Le pregunté a Ostaker por el Ojo de Votank, y me contó que en uno de los viajes que hizo junto a su gran amigo Joumith se les pasó por la cabeza encontrar la montaña de los Grifos, y buscando por la Isla, encontraron el Ojo de Votank, y ahí fue cuando un dientes de sable le hizo las cicatrices de la cara porque se lo robaron a unos votankis. Al regresar, el gigante Gonorta les quitó el Ojo, y se lo llevó. Jou comercia con él, pero nunca se ha atrevido a nombrarle lo del Ojo. Desde entonces les fue imposible recuperarlo.
Durante el resto de la mañana, nos encontramos con un pato y con Gjorni Ojo de Aguila. Nos sentamos en una mesa de al lado, y nos miró mal. Parecía un tipo solitario y raro, y el perro imponía bastante. Gjorni nos dijo que era minero, y nosotros le contamos que íbamos de aventuras por la Isla. Entonces nos dijo que tal vez quisieramos trabajar para él. Mientras tanto, un pato Waddle Pico Verde, el pato, no paraba de molestar porque quería ir de aventuras con nosotros. Pero al ver entrar a Buscavetas, Gjorni salio de la posada. Le pregunté a Buscavetas si le conocia y dice que era un poco loco porque decia que habia una mina de oro que no habia sido descubieta por lo enanos y necesitaba un grupo para ir a buscarla. Nadie queria ir con el.
A mediodía quedamos con Buscavetas en la taberna de Ostaker. Tiene en la cocina un trampilla por la que baja a la habitacion de Buscavetas.
Nos contó que Firshala (La llama), es más que un espíritu de Fuego. Es un poder de los enanos para reparar la maquina. Antaño, con él se encendian los grandes hornos, pero los elfos pronto comenzaron a sentir el calor y los temblores.
Así que temerosos de que el poder acabara con los bosques, lo encerraron.
Me señala en el mapa la localización donde está Firshala. Necesitamos el Ritual de invocación para liberarla, y la piedra candente, pero sólo tiene información de la piedra, el enano ROMPEMATRICES N34455298. Pero nos recomendaba, que para ir a hablar con los enanos, primero deberíamos conseguir el cuerno de marfil mágico, con el cual, los enanos nos escucharian. El problema es que nadie ha encontrado el cuerno. Yo esperaba que nos fuese a contar como ser purificados por la LLama, y le enseñé que su nombre estaba en una lista, y que seguro que sabía algo más. Se le iluminaron ojos al ver algo de aquello y la guarde de nuevo. Tras una tirada de Runa espiritu dificil, Tal vez el espíritu del conocimiento que nos dijo Totakeke, pudiera ayudarnos a encontrar el cuerno. Luego nos dio 2000MP.
En otro rato, fuimos a visitar a los familiares del noble de Nidik que rescatamos en Ockles, y le contamos que habia muerto intentando cerrar la puerta para protegernos del tornado. Nos ofrecio 50 Mp si dabamos con el cadaver.
Abandonamos Nidik, avisando a la guardia de si podíamos salir por el altercado, y nos dijeron que sí.
Durante los 3 primeros dias fuimos explorando, pero no encontramos nada. El resto a paso normal, y los dos últimos dias corriendo.
La noche del 7 estacion del mar nos encontramos con un alosaurio que pasó por encima mio.
Luego nos encontramos con un grupo de zaringas que perseguia unas reses. Nos miraron, pero no quisieron entablar conversación con nosotros.
Dia 9 estacion del mar 20.00 llegamos a Surlt.